LLEIDA
A juicio por rapto 2 investigados por la estafa piramidal a 31 leridanos
Están acusados de retener al propietario de una vivienda a punta de pistola en Bilbao. Un juzgado de Lleida investiga el fraude de tres millones de euros
Dos de los investigados por una supuesta macroestafa piramidal que ha dejado a 31 inversores leridanos con pérdidas por valor de tres millones de euros, como avanzó SEGRE el 22 de octubre, serán juzgados en Bilbao acusados de extorsión, detención ilegal, robo con intimidación y amenazas, entre otros delitos.
Se trata de O.A.R.M. y A.M.D. y la Fiscalía les acusa junto a otras personas del secuestro durante unas horas del propietario de un inmueble en Bilbao, según Crónica Vasca. Un secuestro que presuntamente llevaron a cabo el 30 julio de 2020 para evitar que el dueño de la vivienda acudiera a una notaría donde tenía previsto firmar la compraventa del piso a favor del hermano de O.A.R.M. por un precio 675.000 euros. Al no firmarse dicha operación, el dueño del piso le debía abonar una indemnización de 180.000 euros. Según el Ministerio Público, los investigados se llevaron a la víctima a un domicilio, donde le ataron de pies y manos, le apuntaron con una pistola y le amenazaron mostrándole fotografías suyas y de su familia de vigilancias anteriores. Además, le habrían robado el móvil y dinero. El juzgado de Instrucción 10 de Bilbao dictó hace unas semanas el auto de apertura de juicio oral. En cuanto a la supuesta estafa piramidal en Lleida, el juzgado de Instrucción 1 de la capital del Segrià investiga a O.A.R.M., J.G.G. y A.M.D. tras recibir tres querellas de 31 afectados. Varios de ellos relataron a este periódico que el modus operandi de los presuntos estafadores era siempre el mismo. Se presentaban como expertos financieros y se ganaban la confianza de sus víctimas. A continuación, les ofrecían inversiones supuestamente carentes de riesgo, con altas rentabilidades y supervisadas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), cuando en realidad todo era un engaño. Una vez captados los primeros inversores, los estafadores utilizaban a sus víctimas para atraer a nuevos “inversores” entre sus familiares y conocidos, ampliando así el círculo de afectados. Les aseguraban que siempre podrían recuperar el capital invertido, pero la verdadera intención era apropiarse de todas las cantidades recibidas, que eran desviadas a destinos desconocidos. También están siendo investigados por otros juzgados.