El barrio de Cappont de Lleida, bajo la amenaza del riesgo de inundación, a falta de medidas
Cappont, en Lleida, situado junto al río Segre, enfrenta una probabilidad media de inundación, según la Confederación Hidrográfica del Ebro
El barrio de Cappont, ubicado en la ciudad de Lleida, se encuentra en una situación de riesgo debido a su ubicación en una zona inundable junto al río Segre. A pesar de esto, se ha construido un barrio entero en un área que podría quedar completamente anegada en caso de una avenida de agua. Ahora, la Paeria ultima las medidas de corrección para que el barrio deje de estar en peligro.
Actualmente, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) considera a Cappont como una zona inundable con un período de retorno de 100 años, lo que significa una probabilidad media de inundación. Además, se incluyen varias zonas más de la ciudad, como Pardinyes, el barrio de Noguerola y alrededores de la avenida Madrid de la ciudad.
Según la CHE, habla de Cappont como barrio vulnerable, y que hace del todo necesario acometer las medidas oportunas para reducir el riesgo existente sobre la trama urbana ya existente.
Obras en Lleida para “evitar la inundabilidad” del barrio
La CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro) está actualizando los mapas de las zonas inundables, un proceso que prevé cerrar este año y que ha generado roces con los ayuntamientos de Lleida y de Balaguer. “La Paeria es consciente de la situación y trabaja desde hace años en la mejora de la seguridad de la ciudad”, señaló el alcalde de Lleida, Félix Larrosa, quien anunció varias actuaciones con la CHE para “evitar la inundabilidad de la zona de Cappont”. Así, además de la construcción del muro de Grenyana, de la que está en trámite la adjudicación del diseño, “se harán de acuerdo con la CHE pequeñas intervenciones en las avenidas de Tortosa, de Tarradellas y de Blondel”, dijo.
Períodos de retorno: una medida del riesgo de inundación
Los períodos de retorno son una forma de expresar la probabilidad de que ocurra un evento de cierta magnitud en cualquier año. Por ejemplo:
- Período de retorno de 10 años (ROJO): Probabilidad anual del 10%. Estos eventos relativamente frecuentes podrían ocurrir una vez cada década, en promedio.
- Período de retorno de 100 años (NARANJA): Probabilidad anual del 1%. Estos eventos menos frecuentes pueden ocurrir en cualquier año con esa probabilidad. Las áreas con este riesgo suelen ser consideradas en las regulaciones para planes de urbanismo y seguros contra inundaciones.
- Período de retorno de 500 años (AMARILLO): Probabilidad anual del 0,2%. Estos eventos extremadamente raros tienen una baja probabilidad de ocurrencia, pero pueden tener consecuencias catastróficas debido a su magnitud.
La importancia de la planificación y gestión del riesgo de inundaciones
Comprender los períodos de retorno es crucial para diseñar infraestructuras resistentes a inundaciones, planificar el uso del suelo y preparar planes de emergencia. Los ingenieros y planificadores urbanos utilizan estos datos para determinar los niveles de protección necesarios para edificios, carreteras y puentes.
Además, los mapas de riesgo de inundación, que muestran las áreas susceptibles a inundaciones con diferentes períodos de retorno, son herramientas vitales para las autoridades locales y los ciudadanos. Estos mapas ayudan a identificar las zonas más vulnerables y a tomar decisiones informadas sobre dónde construir y cómo prepararse para posibles desastres naturales.
La riada de 1982: un recordatorio de la fuerza del río Segre
En noviembre de 1982, el Segre y sus afluentes arrasaron con todo a su paso desde el Pirineo al Aiguabarreig con el Cinca. La riada se cobró una veintena de vidas y provocó pérdidas de más de 270 millones de euros en un centenar de poblaciones. Las fuertes lluvias en el Pirineo, con registros de hasta 323 litros por metro cuadrado en 72 horas en Capdella, desbordaron el Segre, superando el metro de altura en la zona más baja de Lleida.
Este desastre puso de manifiesto la necesidad de regular el Segre aguas abajo de Oliana, ya que su pantano, con una capacidad de sólo 84,3 hectómetros cúbicos, fue insuficiente para frenar una avenida de tal envergadura. Fue una de las principales razones que justificaron la construcción del último gran pantano en España: Rialb. Esta obra comportó la inundación de pueblos como Tiurana y Bassella y la afectación de una amplia zona de Oliana, Ponts, La Baronia de Rialb y Peramola.