El jefe de investigación de los Mossos, sobre el Monstruo de Machala: «Estuvo a punto de escaparse»
Sergi Mesalles, jefe de investigación de los Mossos en el caso del asesinato y violación de Isabel Bascuñaña, de la cual este sábado se cumplirán 20 años, explica los pormenores de la búsqueda y captura del autor del crimen, Gilbert Antonio Chamba
El 'Monstruo de Machala' asesinó a Isabel en el 2004 y anteriormente a 8 mujeres en el Ecuador. Intentó violar otras 2 en Lleida
Sergi Mesalles.
Gilbert Antonio Chamba Jaramillo, conocido como el 'Monstruo de Machala', fue condenado a 45 años de prisión por el asesinato y violación de Isabel Bascuñana, una joven estudiante de Derecho de 21 años, en el campus de Cappont de la Universitat de Lleida el 23 de noviembre de 2004. Este sábado se cumplen 20 años de uno de los crímenes más graves de Ponent.
Días después del asesinato, gracias a un periodista, se descubrió que Chamba, ahora con 61 años, ya había matado a otras ocho mujeres en el Ecuador entre 1988 y 1993, por lo cual sólo cumplió ocho años de prisión. En el 2001, la Subdelegación del gobierno de Lleida lo legalizó por error, desapareciendo su horroroso historial delictivo.
La investigación policial
Según declaraciones de Sergi Mesalles, jefe de investigación de los Mossos d'Esquadra, el caso de Isabel Bascuñana generó una gran alarma social y presión. Desde el inicio se constató la agresión sexual a la víctima y había múltiples líneas de investigación abiertas. El trabajo de los equipos fue ingente.
Chamba era uno de los vigilantes del parking donde Isabel aparcó su coche. Fue entrevistado en el lugar y en comisaría, como muchas otras personas. Levantó sospechas de un compañero por sus tatuajes carcelarios y poca colaboración. Sus huellas, encontradas en la bolsa de basura que tapaba el cuerpo, fueron claves por su particular distribución, aunque había otras.
Intentos de fuga y otros ataques
Chamba intentó huir en los días posteriores, comprando varios billetes de avión. Estaba monitorado pero "estuvo a punto que se nos escapara, según Mesalles.
Sólo un día antes del crimen de Isabel, intentó atacar a otra joven en un cine, manipulando su coche, pero ella iba acompañada de un amigo. Meses atrás, también lo había intentado con otra mujer.
Mesalles mantiene que si Chamba sale libre, volverá a delinquir. Destaca la dureza emocional de estos casos, el contacto con los familiares de las víctimas y la sensación de injusticia. "Son crímenes que te marcan".
