LLEIDA
La Policía Nacional pedirá la expulsión de Chamba, el Monstruo de Machala, cuando salga de la cárcel
El Supremo abrió la puerta a su posible deportación pero la decisión es del Gobierno. El sábado se cumplen 20 años del crimen de Isabel Bascuñana y su asesino saldrá en libertad dentro de cinco
La Policía Nacional tramitará el expediente de expulsión de Gilbert Antonio Chamba Jaramillo cuando acabe de cumplir condena en noviembre de 2029. Así lo ha asegurado a este periódico la subdelegación del Gobierno de Lleida, que ha añadido que en ese momento desde Prisiones se comunicará a la Policía Nacional la extinción de la pena privativa de libertad del asesino de Isabel Bascuñana y el cuerpo policial “abrirá un expediente de expulsión”.
El Tribunal Supremo, que en 2007 confirmó la sentencia de la Audiencia de Lleida, mandó dar testimonio a la subdelegación del Gobierno de Lleida –que era quien había regularizado su situación en 2001 pese a que su expediente carecía de la documentación exigida, entre ella, el historial delictivo en Ecuador– “a fin de que, si procediere, se incoe expediente administrativo de expulsión cuando corresponda al amparo del artículo 57 de la Ley Orgánica de Derechos y Libertades de extranjeros en España”.
Chamba es un asesino en serie del que se descubrió días después de ser arrestado por el asesinato de la estudiante de la Universitat de Lleida que había matado a otras ocho mujeres en Ecuador entre 1988 y 1993, crímenes por los que solo cumplió ocho años de prisión. En su país se le conocía como el Monstruo de Machala y fue legalizado por la subdelegación del Gobierno de Lleida en 2001, desapareciéndole por error este horroroso historial delictivo, y fue renovando papeles.
Vicenç Bascuñana, hermano de la víctima, explica que “desde el Gobierno nunca nos han pedido perdón por el error”. La familia Bascuñana acabó siendo resarcida por esta negligencia. Vicenç afirma que “cuando Chamba salga de la cárcel, volverá a matar y a violar”.
De hecho, el asesino todavía no puede disfrutar de permisos penitenciarios –ya ha cumplido gran parte de la condena– porque desde 2022 tiene “disconforme” un Programa Individual de Tratamiento (PIT). Se trata de un programa contra la violencia sexual que se negó a hacer. Chamba cumple condena en Quatre Camins, en la Roca del Vallès (Barcelona), concretamente en un módulo con internos penados por violencia sexual. Tiene 61 años.
Le impusieron 25 años de prisión efectiva aunque la pena era de 45
Pese a ser penado con 45 años –que se cumplirán a finales de noviembre de 2049–, Chamba saldrá en libertad mucho antes. Concretamente, a finales de noviembre del 2029, dentro de cinco años, porque se decretó que cumpliría 25 de prisión efectiva. En España, cuando se cometió el crimen, el máximo legal de prisión efectiva era de 20 años –la prisión permanente revisable es de 2015 y no puede aplicarse retroactivamente– aunque en casos de especial gravedad se podía ampliar hasta los 30.
En el caso del asesino de Isabel Bascuñana se fijó en 25. Además, se le prohibió residir en Lleida, acudir a esta ciudad y sus alrededores en un radio de 100 kilómetros durante los diez años siguientes al cumplimiento de la condena, y acercarse o comunicarse con la familia de la víctima.