Un camarero de Lleida obtiene la incapacidad total porque es alcohólico: “no apto para la profesión”

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha otorgado la incapacidad permanente total a un ayudante de camarero de Lleida diagnosticado con alcoholismo. La sentencia revoca la denegación inicial del Institut de la Seguridad Social (INSS) y el fallo contrario del Juzgado Social 2 de Lleida.

El TSJC argumenta que la profesión del demandante, afiliado como ayudante de camarero pero actualmente trabajando como peón para una entidad social, implica estar en contacto constante con bebidas alcohólicas durante toda la jornada laboral. Esto, según el tribunal, "facilita la posibilidad de consumo, absolutamente contraria al tratamiento de deshabituación al que está sometiéndose, por lo que redundaría negativamente en su curación".

Además, se señala que "las mermas psíquicas del recurrente han generado que se adoptasen medidas judiciales de apoyo para personas con discapacidad al estar altamente comprometida su autonomía y capacidad de decisión". Por lo tanto, el TSJC concluye que el trabajador "no está en condiciones de llevar a cabo su profesión habitual".

Detalles de la incapacidad concedida

La incapacidad permanente total reconocida al camarero leridano tiene efectos desde noviembre de 2022 y le da derecho a percibir una pensión mensual inicial equivalente al 55% de su base reguladora. Esta prestación es compatible con la realización de otros trabajos distintos a su profesión habitual.

No obstante, la sentencia deja abierta la posibilidad de revocar la incapacidad si se constata una mejoría en el estado de salud del trabajador. El fallo del TSJC no es firme y cabe recurso ante el Tribunal Supremo.

Contexto y casos similares

Este caso se suma a otros recientes relacionados con la concesión o retirada de incapacidades laborales por motivos de salud y adicciones. Hace unos días, el Tribunal Superior de Justicia de Murcia desestimó el recurso de un albañil al que se le había retirado la incapacidad permanente absoluta tras constatarse una mejoría en su estado de salud y su recuperación de una adicción a la cocaína.

Existen diversos grados de incapacidad permanente reconocidos por la Seguridad Social española: parcial, total, absoluta y gran invalidez. Cada uno de ellos implica diferentes niveles de limitación para desempeñar una actividad laboral y da derecho a prestaciones económicas proporcionales.

Revisiones periódicas de las incapacidades

Por norma general, las revisiones del estado de la incapacidad se realizan cada dos años para evaluar si se han producido cambios significativos en la salud o las capacidades del trabajador. Estas revisiones pueden dar lugar a la modificación del grado de incapacidad reconocido o incluso a su retirada si se constata una mejoría suficiente.

La sentencia del TSJC que concede la incapacidad permanente total a un camarero alcohólico de Lleida sienta un precedente al reconocer la incompatibilidad de ciertos trabajos con el tratamiento de deshabituación de adicciones.