Lleida, segunda gran ciudad catalana con más volumen de locales comerciales vacíos

Más de un tercio de los locales comerciales de Lleida están vacíos, lo que la convierte en la segunda ciudad catalana de más de 100.000 habitantes con un mayor porcentaje en esta situación. Así lo constatan los datos del mapa comercial de Catalunya facilitados por la Generalitat al ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública, cuyo último informe data del pasado junio, que muestran que de los 8.197 locales comerciales que hay en la capital, 3.160 están en desuso, lo que representa el 37,92% del total. 

Un número que ha aumentado respecto años anteriores y que sitúa a Lleida como la capital de provincia catalana donde hay más, muy por delante de Barcelona (18,2%), Tarragona (16%) y Girona (23,3%).En lo que respecta al resto de ciudades catalanas de más de 100.000 habitantes, también supera a Sabadell (15,9%); Terrassa (16%); Badalona (24%); Mataró (27,6%), L’Hospitalet de Llobregat (30%) y Santa Coloma de Gramenet (36,7%). Solo está por detrás de Reus, que casi tiene la mitad de sus locales comerciales cerrados (46,8%).

De los 5.088 locales de Lleida que sí tienen actividad, el grueso más importante son los de negocios relacionados con el sector servicios, como por ejemplo agencias inmobiliarias y peluquerías, con 1.843. Le siguen los de hostelería y restauración (759); equipamientos para la persona (597); alimentación (463); negocios no comerciales (439); establecimientos para vehículos como talleres, aparcamientos o concesionarios (284); de otras categorías (266); equipamientos para el hogar (236); y culturales (201).

El presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Lleida, Josep Maria Esteve, calificó ayer de “barbaridad” la cifra de locales vacíos en Lleida, pero admitió que la actividad de locales comerciales en la periferia “está condenada” y difícilmente revertirá la situación. “Ha habido un cambio de paradigma con los locales comerciales, antes se hacían en cada nueva promoción, pero con las nuevas de ahora los bajos se aprovechan para aparcamientos o viviendas si no están en calles importantes de los barrios, como podría ser Baró de Maials”, dijo Esteve, que detalla que en las zonas periféricas “puedes encontrar un local a la venta por 40.000 euros, a precio de saldo”. 

Por todo ello, el presidente de los API aboga por que en los barrios periféricos “se deberían reconvertir locales vacíos en viviendas y en aparcamientos”. Para las zonas más céntricas, aboga por ajustar precios para generar actividad y demanda y que haya “locomotoras o espacios de atracción de clientes, como lo serán la nueva estación de autobuses o los nuevos cines de la Illa de l’Oci. Estos locales generan actividad en la zona a nivel de oferta comercial, de ocio y de servicios”, añadió.

Por su parte, la Paeria ha encargado un censo para actualizar el número de locales vacíos en la ciudad y establecer estrategias para promocionar su reapertura mediante ayudas.

La Paeria da ayudas para abrir 11 establecimientos y reformar 22

El ayuntamiento repartirá 130.000 euros entre 33 beneficiarios para la apertura de 11 locales comerciales y de restauración y rehabilitar otros 22 en el Barri Antic, Rambla Ferran y alrededores, Mariola y Mangraners. Este es el balance de la convocatoria de subvenciones para fomentar la apertura de comercios de este año, de la que el gobierno municipal informó ayer en comisión. 

En total se recibieron 51 solicitudes, de las que 10 fueron excluidas al no cumplir las bases, 5 por duplicadas y 3 al estar fuera de plazo. La edil de Promoción Económica, Pilar Bosch, detalló que de los 33 beneficiarios de la ayuda, 22 están en el Barri Antic, 9 en el entorno de Ferran, uno en la Mariola y otro en Mangraners. Destacó que estos 33 locales generan 225 puestos de trabajo directos.