LLEIDA
Otro derrumbe en el Turó de la Seu Vella de Lleida
El muro de la Llengua de Serp se desprendió parcialmente el sábado y la Paeria cortó sus accesos y dos calles del Centro Histórico. “Llevamos un año avisando que hacían falta medidas urgentes”
El conjunto monumental de la Seu Vella sufrió el pasado sábado un nuevo desprendimiento en la zona de la muralla de la Llengua de Serp que ha obligado al ayuntamiento a cortar su acceso, el camino inferior y el paso de vehículos por las calles Sant Andreu y Ronda de la Seu Vella. Un derrumbe que constata el deterioro de la fortificación y que la Associació d’Amics de la Seu Vella atribuye a la falta de mantenimiento, además de remarcar que podía haberse evitado. “Llevamos más de un año avisando de que hacían falta actuaciones urgentes para estabilizar esa zona, pero no han hecho nada y ahora las reparaciones serán mucho más costosas y largas”, aseguró el presidente de la entidad, Joan Ramon González.
Según informaron fuentes municipales, el pasado 30 de diciembre se detectó “un abombamiento en esa zona del muro y por precaución se cerraron los accesos al baluarte”. Posteriormente, el sábado día 4 se produjo el desprendimiento, que ha abierto una brecha en la muralla, y el ayuntamiento procedió a asegurar el camino de acceso al muro y a cortar el tráfico en parte de la calle Ronda Seu Vella. Y la noche del domingo al lunes se amplió el corte de tráfico a la calle Sant Andreu entre Ronda de la Seu Vella y el inicio de la calle Sant Martí por seguridad tras la inspección de un técnico municipal ante la posibilidad de que la lluvia provocara daños mayores en la muralla. La Paeria tiene previsto aprobar hoy por decreto de urgencia las medidas inmediatas de reparación y consolidación.
“El desplome de ahora demuestra el mal estado en el que se encuentra la fortificación de la Seu Vella, es un desastre”, lamentó González, que remarcó que “quizás las lluvias hayan sido la causa final del derrumbe, pero el problema de raíz es el mal mantenimiento de la fortificación del Turó, que es la gran olvidada”. Por ello, el presidente de los Amics de la Seu Vella pidió a las administraciones tomar medidas para asegurar y estabilizar el entorno del Turó tras años de inacción. “Hay voluntad para hacerlo, pero todo va lento y las actuaciones llegan tarde y al final acabamos pagando de más porque si se hubieran hecho antes habrían quedado mejor y hubieran resultado más baratas”, lamentó González.
En abril de 2023 la Paeria ya acordonó la zona que se ha desplomado ahora tras aparecer una grieta y anunció un estudio del estado de este tramo del muro. Ese año hubo otro desprendimiento en la muralla que da al parque de Santa Cecília, que está muy degradada, y en 2021 también se desplomó otro tramo entre los baluartes de la Reina y de Louvigny. Paralelamente, el pasado diciembre la Paeria afirmó que este año tendrá el plan de murallas listo y habrá mejoras en la zona valoradas en unos tres millones de euros.