SEGRE

Lleida tiene más de 120 kilómetros de aceras no accesibles

Barreras arquitectónicas: un obstáculo cotidiano en la ciudad

Un paso de peatones en Prat de la Riba donde la rampa está totalmente desplazada.

Un paso de peatones en Prat de la Riba donde la rampa está totalmente desplazada.Amado Forrolla

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Según un estudio de SEGRE, más del 36,6% de las aceras de Lleida no son accesibles para personas con movilidad reducida. En algunos barrios, este porcentaje asciende hasta el 80%, lo que supone un total de 123,62 kilómetros de aceras que no cumplen con la amplitud mínima de 1,8 metros exigida por la normativa.

Rosa Maria Monfort, una leridana que tras un largo periodo de hospitalización ahora debe desplazarse en silla de ruedas, sufre a diario las múltiples barreras arquitectónicas presentes tanto en la vía pública como en los comercios de la ciudad. Desde socavones en las aceras y pasos de peatones mal conectados, hasta escalones imposibles de esquivar para acceder a algunos establecimientos, Monfort lamenta que "circular en silla de ruedas es imposible" y que no puede "disfrutar de su ciudad".

Ejemplos de zonas inaccesibles en Lleida

Monfort señala varios puntos conflictivos en la ciudad, como el paso de peatones de Prat de la Riba con Príncep de Viana, donde las rampas no están bien encaradas y provocaron su caída en una ocasión. También menciona zonas de Ronda y Onze de Setembre con pendientes difíciles de remontar, el acceso peligroso y estrecho al tanatorio por el Camí de Montcada, y numerosas aceras estrechas con mobiliario urbano que obstaculiza aún más el paso.

Incluso edificios públicos como la Paeria presentan problemas de accesibilidad, mientras que los adoquines en la subida al Turó de la Seu Vella le provocaron tal temblor al pasar con la silla que desencadenó una peritonitis. Además de las dificultades en la calle, Monfort también encuentra barreras para realizar sus compras diarias, teniendo que pedir ayuda para sacar dinero de un cajero y encontrándose con escalones que le impiden entrar en muchas tiendas.

Incumplimiento de la normativa de accesibilidad

Ton Montardit, vocal de accesibilidad de la asociación Aspid, afirma tajantemente que "la ley dice que las calles deben tener un mínimo de 1,8 metros de ancho, lo cual no se cumple en muchos sitios, y muchos edificios públicos son totalmente inaccesibles". Reconoce que las zonas más problemáticas son los centros históricos de los barrios y que algunas reformas, como la de la Rambla de Pardinyes, no se realizaron correctamente debido al excesivo desnivel de las rampas.

Montardit destaca la importancia de un mantenimiento adecuado de la vía pública, señalando que "si hay un socavón en la calzada se arregla al momento, pero si está en la acera, puede estar allí meses". Cada mandato, la asociación Aspid envía a la Paeria un listado de las zonas inaccesibles de Lleida.

Planes de accesibilidad y plazos de cumplimiento

Begoña Iglesias, teniente de alcalde de Gestión de la Ciudad, admite que "falta mucho trabajo por hacer para que Lleida sea realmente accesible" y que el presupuesto de este año prevé una importante inversión en el mantenimiento de la vía pública, atendiendo a las peticiones de entidades como Aspid. En 2023, la Generalitat otorgó a los ayuntamientos un plazo de tres años para redactar un plan de accesibilidad y ocho años adicionales para aplicarlo y cumplirlo. "Tenemos 2 años para hacer el plan y aplicarlo", concluye Iglesias.

Titulars del dia

* camp requerit
Subscriu-te a la newsletter de SEGRE
tracking