Lleida aún no tiene todas las cámaras de la Zona de Bajas Emisiones

La Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Lleida entró en funcionamiento el pasado 1 de enero, pero el ayuntamiento todavía no ha instalado todas las cámaras y lectores de matrícula que controlan las entradas y salidas de esta área, que en su fase inicial y hasta 2028 abarca todo el Centro Histórico. Así lo aseguró ayer la teniente de alcalde de Movilidad, Cristina Morón, que señaló que “todavía nos falta poner dos cámaras y tres lectores de matrículas que nos tienen que llegar de la Generalitat, pero esperamos poder colocarlas en las próximas semanas”. 

Añadió que estas primeras semanas la ZBE “ha funcionado con total normalidad” y que entre abril y mayo empezarán a enviar avisos para los conductores que la incumplan. Un período de gracia que durará hasta junio, momento en que empezarán a multar a los infractores. Asimismo, Morón señaló que están pendientes que la Generalitat ponga en marcha el sistema informático que controlará los accesos a la ZBE.

Por otro lado, Morón y la portavoz adjunta del PSC de Lleida, Marina Díaz, destacaron que en el pleno municipal del pasado viernes acordaron la disolución del consejo del Área Residencial Estratégica (ARE) para que la Paeria avance en el desarrollo de este sector urbanístico situado entre Cappont y La Bordeta “donde están proyectadas 3.500 viviendas, la mitad de protección oficial”. Apuntaron que pedirán más recursos a la Generalitat para mejorar la seguridad en l’Horta y remarcaron que aprobaron licitar el nuevo contrato para el alumbrado público, que ayer salió a licitación. Tendrá una duración de 12 años, está presupuestado en 32 millones de euros y permitirá que todo el alumbrado de la ciudad sea 100% con tecnología LED.