Rajoy obvia valorar la Diada y su Gobierno rechaza la consulta

El Gobierno en funciones rechazó ayer de plano la petición de un referéndum anunciada por el President de la Generalitat, Carles Puigdemont, mientras que el presidente del gobierno en funciones, Mariano Rajoy, obvió en una reunión en el Congreso con los diputados del PP la valoración de la Diada y del referéndum anunciado por Puigdemont.

La vicepresidenta del gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, calificó de “ilegal” y “oportunista” la idea de Puigdemont de convocar unas “elecciones constituyentes” el próximo año y plantear al Estado una nueva propuesta de referéndum.

Por su parte, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, replicó al President Puigdemont que el referéndum independentista, ya sea pactado o no, es ilegal y que, por tanto, caerá “todo el peso de la ley” sobre quien cometa cualquier irregularidad en este sentido.

Por otro lado, la Comisión Europea eludió comentar el seguimiento de la manifestación de la Diada en Catalunya porque tiene por norma no pronunciarse sobre asuntos que pertenecen al “orden constitucional interno” de un Estado miembro.

Por otra parte, la Fiscalía de la Audiencia Nacional está a la espera de que los Mossos d’Esquadra le remitan los atestados de los sucesos acaecidos durante la manifestación anticapitalista de la Diada que recorrió este domingo las calles de Barcelona y convocada por la CUP y en la que decenas de personas quemaron imágenes del rey Felipe VI y páginas de la Constitución.

A causa de las diferencias en el recuento,

la Crida per Lleida (CUP) anunció que pedirá la comparecencia “urgente” del intendente de la Guardia Urbana para que explique el proceso de recuento.

La formación independentista leridana denuncia que los cálculos de la Urbana “se hicieron bajo criterios políticos con el objetivo de minimizar la mayor manifestación de la historia de Ponent” y “hace evidente que el equipo de gobierno de la Paeria ha perdido el norte”.

Polémica leridana por el recuento de manifestantesEl alcalde de Lleida, Àngel Ros, defendió ayer la “profesionalidad” de la Guardia Urbana a la hora del recuento de personas en la manifestación en la canalización del río Segre en motivo de la Diada. Fueron 30.000 manifestantes según la Urbana. Ros dijo que la Urbana “conoce la calle y sabe medir” y comentó que los cálculos del cuerpo se basaron, al margen de la propia concentración, también en los aparcamientos utilizados –dos se ocuparon al 100%, uno al 60% y otro al 20%- y el volumen de autocares que se desplazaron hasta la capital del Segrià, un total de 45, según Ros. Sin embargo, los organizadores del evento, ANC y Òmnium, aseguraron que 120.000 personas asistieron en la manifestación. El alcalde de Lleida, Àngel Ros, defendió ayer la “profesionalidad” de la Guardia Urbana a la hora del recuento de personas en la manifestación en la canalización del río Segre en motivo de la Diada. Fueron 30.000 manifestantes según la Urbana. Ros dijo que la Urbana “conoce la calle y sabe medir” y comentó que los cálculos del cuerpo se basaron, al margen de la propia concentración, también en los aparcamientos utilizados –dos se ocuparon al 100%, uno al 60% y otro al 20%- y el volumen de autocares que se desplazaron hasta la capital del Segrià, un total de 45, según Ros. Sin embargo, los organizadores del evento, ANC y Òmnium, aseguraron que 120.000 personas asistieron en la manifestación.