RELACIONES INTERNACIONALES
Obama alerta contra los muros y el populismo en las Naciones Unidas
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, abogó ayer por un mundo interconectado y criticó los muros y el “populismo” ante la Asamblea General de Naciones Unidas, en el que fue su último discurso en este foro antes de abandonar la Casa Blanca a principios de 2017. “Una nación rodeada de muros es prisionera de sí misma”, afirmó Obama, que tomó la palabra en la sesión inaugural de discursos de líderes internacionales.
Con la campaña electoral como telón de fondo, el mandatario norteamericano defendió un mundo interconectado y globalizado frente al “nacionalismo agresivo” y el “populismo vulgar”. Obama no mencionó en ningún momento al polémico magnate Donald Trump, pero su estela sobrevoló un mensaje que sonó a despedida. “El mundo es demasiado pequeño para que construyamos muros”, dijo.
En el lado de los retos pendientes, Obama mencionó la disparidad entre ricos y pobres, el auge del terrorismo yihadista, las ambiciones nucleares de Corea del Norte -para las que reclamó sanciones- y la guerra de Siria, entre otros. En relación a este último punto, volvió a defender la diplomacia como instrumento de resolución del conflicto. El presidente de EEUU también aludió expresamente a Rusia, para recriminar que el país quiera recuperar la “gloria perdida” a través de la fuerza.
Por su parte, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aseguró que la supuesta “organización terrorista” liderada por el predicador Fethullah Gülen a la que responsabiliza por el fallido golpe de Estado de julio amenaza a la “mayoría de países” de la ONU, y llamó a combatirla. En su discurso ante la Asamblea General, Erdogan también dio por muerto el acuerdo de alto el fuego en Siria, pese a los intentos de EEUU y Rusia por revivirlo, y acusó a la Unión Europea (UE) de no cumplir sus promesas de ayuda a Turquía para la acogida de refugiados.
En este sentido, el presidente francés, François Hollande, exigió también acciones inmediatas para detener la guerra en Siria y urgió especialmente a los aliados del régimen de Damasco a comprometerse con la paz.
May subrayó en su discurso que Reino Unido siempre ha sido un aliado “seguro, fuerte y fiable” a nivel internacional y aseguró que esta posición no cambiará una vez se consume el ‘Brexit’. “Seguirá estando en el centro de los esfuerzos internacionales para garantizar la paz y la prosperidad de nuestro pueblo”, declaró la primera ministra.