Sánchez reta a sus críticos con un congreso con primarias tras la debacle autonómica

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, defendió ayer que “ha llegado la hora” de que la militancia cierre el debate interno sobre una posible abstención ante una investidura de Mariano Rajoy. Sánchez planteó la convocatoria de unas primarias para elegir al secretario general el próximo 23 de octubre y retó a quien crea que tiene un “proyecto mejor” que el suyo a competir en esas elecciones, además de comunicar su intención de convocar el 39 Congreso Federal de la formación a principios de diciembre.

Sánchez, tras la reunión de la Permanente de la Comisión Ejecutiva, se mostró convencido de que el Comité Federal del próximo sábado no pondrá “impedimentos” a que se dé la palabra a los militantes y dejó claro que él se presentará a la primarias para defender un PSOE que no sea “subalterno” del PP. Sánchez subrayó que el debate abierto en el PSOE no es “menor” ni “técnico”, sino “de fondo” porque marcará la línea que deberá seguir el partido en los próximos años, y porque la organización necesita volver a estar “unida”.

El líder del PSOE reconoció que en su partido hay diferencias sobre la posición que debe tener ante el bloqueo político y las tres opciones que, resumió, existen: dejar gobernar a Rajoy, intentar un gobierno alternativo o ir a terceras elecciones. Así, y después de recalcar que “jamás un ‘no’ como el ‘no’ del PSOE a Rajoy está más justificado”, defendió que su postura es la de intentar una alternativa al PP con Podemos y Ciudadanos. “Vamos a trabajar lo indecible para lograr un gobierno del cambio transversal y de amplia base parlamentaria”, dijo, aunque reconoció que no podrá cerrar ningún acuerdo hasta que se pronuncien las bases. En el otro extremo, explicó, hay otros dirigentes del partido que creen que con 85 diputados no se puede gobernar y a los que situó en la abstención al PP, una postura que él rechaza porque cree que sería colocarse en “una posición subalterna” al partido de Mariano Rajoy.

Así, y sin citar a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en ningún momento, retó a quienes están en esta postura a que den un paso adelante y lo defiendan, porque cree que “es legítimo” tener otra estrategia. “Ya va siendo hora de que hagamos un debate de verdad, que digamos la verdad”, sentenció.

Ros reclamó a los barones del PSOE cohesión y que cierren filas con el líder del partido porque tiene todo el derecho a buscar un gobierno alternativo de progreso que renueve las instituciones y mejore el encaje de Catalunya en España.