TRATADO COMERCIO
Bélgica desbloquea el tratado de comercio de la UE con Canadá
La zona francófona de Valonia levanta su veto al CETA || La Unión Europea da su visto bueno al acuerdo alcanzado y ahora se espera que lo haga Ottawa
Los representantes políticos de las distintas regiones y comunidades lingüísticas de Bélgica lograron ayer un consenso para desbloquear el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá, el llamado CETA, que hasta ahora vetaba la mitad francófona de Valonia. La cumbre bilateral en la que se pretendía firmar en un principio estaba prevista para ayer mismo, pero el desarrollo de los acontecimientos obligó a cancelarla y más tarde fue cuando Bélgica anunció que había llegado a un acuerdo.
Tras varios ultimátums y al término de una reunión de dos días cargada de dramatismo, el primer ministro belga, el liberal Charles Michel, anunció que Bélgica había consensuado una posición común.
“Al abrirse el mercado para países competidores, el melocotón de Lleida puede salir afectado”
El presidente de Valonia, el socialista Paul Magnette, logró que sus compatriotas acepten que Bélgica pueda recurrir al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para verificar que el sistema jurisdiccional de inversiones es compatible con el mecanismo de arbitrajes que contempla el CETA.
Se dirime así una de las grandes preocupaciones de Magnette, que rechazaba que los tribunales públicos fueran sustituidos por arbitrajes internacionales privados para resolver los conflictos entre inversores y Estados y criticaba también la falta de transparencia de la Comisión Europea en la negociación, entre otros puntos.
Más tarde, los Veintiocho dieron su visto bueno al acuerdo alcanzado entre las autoridades belgas. Canadá se mostró “optimista” y espera poder cerrar pronto el acuerdo.
Unas consecuencias inciertas para LleidaLos sindicatos leridanos no tienen muy claro cuáles van a ser las consecuencias del tratado de libre comercio con Canadá, conocido como CETA, sin embargo, coinciden en que van a ser de carácter negativo para pequeñas empresas, y que solo se beneficiarán las grandes corporaciones. “Las consecuencias solo las saben los negociadores, y estos se reúnen en secreto, así que mucho no podemos saber”, manifestó ayer David Borda desde JARC. “Muchas explotaciones ganaderas pequeñas van a tener que cerrar”, lamentó, dado que las condiciones de acceso al mercado son desiguales respecto a Canadá. En el mismo sentido se expresó también Josep Carles Vicente desde Unió de Pagesos. “El mercado se abrirá para países competidores de los mismos productos y en Lleida puede que afecte a variedades de melocotón”, explicó. Además, aseguró que al extenderse la temporalidad de productos, bajarán los precios y los costes laborales de los trabajadores subirán. Además, la Plataforma STOP CETA de Ponent-Pirineus incidió que las denominaciones de origen verán peligrar su existencia porqué Canadá solo reconoce las DO del aceite y del vino. Sin embargo, denominaciones de origen leridanas están a la espera de que la Generalitat les dé más información al respecto.