POLÍTICA PAÍS VASCO
“Catalunya y el País Vasco están en ciclos diferentes”
Puigdemont asiste a la toma de posesión de Urkullu || El lehendakari trabajará “por una Euskadi mejor y para todos”
Santamaría y Puigdemont se saludan en la toma de posesión.
El President de la Generalitat, Carles Puigdemont, asistió ayer a la toma de posesión de Iñigo Urkullu como lehendakari del País Vasco, donde estuvo sentado junto a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Puigdemont mostró su respeto por el proceso en Euskadi y deseó que “el pueblo vasco pueda ir tan lejos como se proponga”.
No obstante, el President reconoció que Catalunya y el País Vasco se encuentran actualmente en “ciclos diferentes”. “Pero siempre hay un gran respeto por las decisiones que tomen respectivamente los dos pueblos. Así ha sido y así debe seguir siendo”, precisó.
Santamaría transmite a Urkullu la “voluntad de entendimiento” y le insta a “trabajar juntos”
El President de la Generalitat fue una de las autoridades que se personó en la Casa de Juntas de Gernika para acompañar el lehendakari Urkullu en “un momento especial de la historia del País Vasco” y hacer patente también “el afecto, respeto , acompañamiento y solidaridad” que se profesan Catalunya y el País Vasco.
Por su parte, Urkullu se comprometió a trabajar “por una Euskadi mejor y para todos”, en un acto en el que Santamaría transmitió “la máxima voluntad de entendimiento” con el nuevo Ejecutivo vasco.
En opinión de Santamaría, “es el momento de trabajar todos juntos”, cuando “se pone en marcha un nuevo Gobierno”. “El nuestro está hace escasas semanas en marcha y a partir de días como hoy, más de ceremonia, se abren días de trabajo”, manifestó. La vicepresidenta espera que esos días sean “intensos y fructíferos”.
El acto en sí, protocolario, se desarrolló según lo previsto: el lehendakari prestó el juramento tradicional, con ligeras modificaciones, utilizado en 1936 por el primer lehendakari, José Antonio Agirre, únicamente en euskera y sobre sendos ejemplares del Estatuto de Gernika y del Fuero Viejo de Vizcaya.
Por su lado, el líder de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, dejó la “mano tendida” a Urkullu para construir un nuevo marco político basado en el derecho de autodeterminación, y advirtió de que si no se contempla este derecho no entrarán en ningún acuerdo.
