PANORAMA
El último icono del siglo XX
Fidel Castro, hijo de un emigrante gallego y una mujer de origen canario, nació en Birán, en el este de Cuba, en 1926, en el seno de una familia humilde e iletrada. A principios de los 50 inició lo que bautizó como El Movimiento, un grupo que comenzó a realizar ataques contra las fuerzas de seguridad cubanas. En 1953 lideró el ataque contra el Cuartel Moncada en Santiago de Cuba, que acabaría con gran parte de la organización detenida. Castro sería sentenciado a 15 años de prisión. Su frase “condenadme, no me importa, la Historia me absolverá”, pronunciada durante el juicio fue la primera de una larga colección de frases que le hicieron famoso.
Tras el fracaso de Moncada estuvo en la cárcel durante casi dos años y luego se exilió a México: allí conoció a Ernesto “Che” Guevara, con quien volvió a Cuba a bordo del “Granma” con otros 82 expedicionarios para comenzar la lucha guerrillera de Sierra Maestra (1956-1959). Derrotó al dictador Fulgencio Batista en una guerra desigual aprovechando el descontento social que vio en el jefe de los “barbudos” un líder capaz de reinventar la identidad nacional.
Conocido por sus discursos y su actitud impetuosa, ha formado parte de la historia viva del siglo XX
A partir de este momento comenzaron las reformas de corte marxista, como la nacionalización de las industrias.
En 1961, en vísperas de derrotar la invasión anticastrista de Bahía de Cochinos, declaró el carácter socialista de su Revolución y comenzó con la URSS una larga alianza que tuvo sus altas y bajas, incluida la tensa “crisis de los misiles” con EEUU en 1962, que puso al mundo al borde de una guerra nuclear.
Tres décadas después, la profunda dependencia de la URSS se desveló en toda su magnitud con la caída del bloque soviético y Cuba tuvo que declarar el “periodo especial”, una economía de guerra en tiempos de paz donde la revolución tuvo que abrirse al dólar y al turismo.
Conocido por sus largos discursos, que duraban horas, ha formado parte de la historia viva del siglo XX.
Al hombre que gobernó Cuba con mano férrea solo la enfermedad pudo apartarle del poder y en 2006 delegó todos los cargos en su hermano Raúl.