POLÍTICA PRESUPUESTOS
JXSí y la CUP pactan gravar bienes de lujo a nombre de empresas
El Govern presenta hoy los presupuestos sin el ‘sí’ definitivo de la CUP || Unos 2.200 cargos institucionales de Catalunya se registran en la Assemblea d’Electes
Junts Pel Sí y la CUP presentaron ayer una proposición de ley que regula la creación del llamado impuesto de activos improductivos, que grava bienes de lujo y que tendrá un mínimo exento de 500.000 euros o de 100.000 euros, si no incluye inmuebles, y cuyo tipo máximo será del 1 %.
La proposición de ley conjunta busca gravar bienes inmuebles, embarcaciones, coches de lujo y aeronaves que están a nombre de personas jurídicas pero que no se usan para actividades económicas, sino con fines particulares. Esta era una de las medidas fiscales acordadas entre el Govern, JxSí y la CUP en el marco de la negociación de los presupuestos de la Generalitat para 2017, aunque la dos formaciones acordaron tramitar este nuevo impuesto mediante una ley específica.
Las cuentas incluyen 1.050 millones más en gasto social y recursos para el referéndum
El expresident vaticina que habrá diálogo si el independentismo gana fuerza social y política
JxSí y la CUP se proponen que el impuesto esté en vigor ya en 2017 y dejaron fuera de la medida a las administraciones públicas, las representaciones diplomáticas o las oficinas consulares en Catalunya y también los bienes de fundaciones, ONG y entidades sin ánimo de lucro.
En este sentido, el vicepresident del Govern, Oriol Junqueras, presentará hoy en el Parlament el proyecto de cuentas públicas sin tener la garantía de que la CUP dará el ‘sí’ definitivo que permita aprobarlos. Los cupaires garantizan que permitirán que los presupuestos se admitan a trámite, pero quieren introducir cambios en la tramitación parlamentaria y no aseguran su aval definitivo.
El Govern ya avanzó que el proyecto incluirá 1.050 millones de euros más en gasto social respecto a las cuentas de 2015, que están prorrogadas, además de incluir los recursos para convocar un referéndum de independencia.
Por su parte, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, afirmó que el Gobierno central estudiará “ámbitos de impugnación” de los Presupuestos catalanes 2017 si incluyen una partida para el referéndum sobre la independencia.
En otro orden de cosas, la Assemblea d’Electes de Catalunya ya tiene registrados 2.200 cargos un mes después de su presentación. La presidenta de la Asociació Catalana de Municipis (AMI), Neus Lloveras, remarcó que el camino hacia la república catalana entra “en su recta final” y que hay que estar preparados por si el Estado “pone obstáculos” a la organización del referéndum. La asamblea de cargos se convocaría en el supuesto de que el Estado suspendiera la autonomía de Catalunya.
El presidente gallego pronunció ayer en el Círculo de Economía de Barcelona la conferencia “Estabilidad y sostenibilidad en un Estado descentralizado”, con la presencia del líder del PP catalán, Xavier García Albiol, entre los asistentes. En su intervención, Feijóo consideró que en la nueva etapa política que se abre se debe “desterrar la demonización del que piensa o siente diferente”, ya que “es malo hacer un tabú de cualquier trato con el partido mayoritario en España y es poco saludable hacer exorcismos con el nacionalismo catalán”. “No caben líneas rojas, sino que debe haber muchos teléfonos rojos, con una permanente comunicación”, defendió Núñez Feijóo.
En una comida organizada por la Cámara de Comercio de Barcelona, Mas advirtió, no obstante, sobre la actual oferta de negociación del nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy, que para que el diálogo “sea productivo” y no un simple eslogan “no debe haber condiciones, limitaciones o líneas rojas”. Esto implica, subrayó, que “el derecho a decidir y la celebración del referéndum tienen que formar parte” del diálogo y que, en contrapartida, la parte catalana “tiene que aceptar que el Gobierno central esté en contra de la independencia”.