POLÍTICA
Los partidos discrepan sobre cuándo y para qué reformar la Constitución
Rajoy ha apelado a la prudencia ante su posible reforma y ha advertido de que no es momento para "frivolizar" ni para que se planteen "ocurrencias e historias"
Desde hace años, el aniversario de la Constitución ha servido para debatir sobre su vigencia y en su 38 cumpleaños se ha cumplido la tradición. Esta vez, toda la clase política coincide en que toca ya su puesta al día aunque, eso sí, no hay acuerdo sobre cuándo abordar la reforma y sobre todo, para qué.
En un momento político sin mayorías claras en el Parlamento podría parecer más difícil que nunca abordar esa reforma de la Carta Magna, aunque algunos creen que es precisamente ahora cuando se puede coser un consenso parecido al que alumbró la Constitución en 1978.
Aprovechando la recepción oficial en el Congreso por el aniversario constitucional, Mariano Rajoy ha apelado a la prudencia ante su posible reforma y ha advertido de que no es momento para "frivolizar" ni para que se planteen "ocurrencias e historias".
Rajoy está dispuesto a escuchar las propuestas que sean razonables pero ha alertado de que debe tenerse claro qué se quiere cambiar y qué es lo que no hay que tocar.
El jefe del Ejecutivo ha subrayado que si se creara en el Congreso una subcomisión para la reforma de la Constitución como ha pedido el PSOE, habría que tener "una idea aproximada de cuál es el final" de la misma.
Ha secundado sus palabras la presidenta del Congreso, Ana Pastor, que ha advertido de que cualquier reforma constitucional debe contar "con todos" porque la actual Carta Magna no puede cambiarse por otra "solo por y para algunos" y que el debate parlamentario "debe procurar construir y no demoler".
El presidente de la Comisión Constitucional, Jesús Posada, que será el encargado de moderar los debates de esa posible reforma, ve posible abordarla en cuanto se despejen el primer año de legislatura, en el horizonte de 2017.
Posada cree además que para que esa reforma tenga la misma legitimidad que la Constitución del 78 debería someterse a referéndum, a pesar de los riesgos que conlleva.
A pesar de la prudencia expresada por el Gobierno, el PSOE insiste en la necesidad de iniciar los trabajos parlamentarios para abordar la reforma sin necesidad de esperar a que los socialistas celebren el año que viene el Congreso Federal en el que elegirán a su nueva dirección.
Es la opinión del presidente de la gestora, Javier Fernández, y también del presidente extremeño, Guillermo Fernández-Vara, que está convencido de que no hace falta esperar a su congreso para empezar a debatir sobre esa futura reforma.
Ha abundado en esa idea el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que también ha acudido a la cita en el Congreso, y ha abogado por abrir una "mesa de diálogo constructivo" sobre la Constitución de 1978.
Más prudente, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha dejado claro que aunque la Constitución Española está "plenamente vigente", quizá sea necesario revisarla aunque ha asegurado que si el debate sobre la reforma "va a dividir a los españoles, es preferible no acometerlo".
Desde Ciudadanos, Albert Rivera ha pedido al resto de fuerzas políticas que sean "valientes" para afrontar una "modernización y actualización" de la Constitución que consiga el mayor consenso posible, pero eso sí, "sin privilegios" para ningún territorio.
Rivera ha reconocido que si bien la Carta Magna es una "de las mejores del mundo" necesita ponerse al día con los mecanismos de reforma ya previstos.
Convencido de que hay espacio para el "consenso", algo que es "sano y bueno" para la democracia, el líder de Ciudadanos ha dejado claro que ante todo defenderán la "igualdad" de todos los españoles y no entrarán en ninguna negociación en la que esté sobre la mesa "la ruptura" del marco constitucional.
En ausencia de Pablo Iglesias y de Íñigo Errejón en el Congreso, Podemos ha estado representado en la celebración por su secretario de Organización, Pablo Echenique, y por la secretaria de general del grupo parlamentario, Carolina Bescansa.
Echenique ha denunciado las "violaciones sistemáticas" que han hecho y siguen haciendo de la Constitución los gobiernos del PP y del PSOE y ha defendido que se respete su articulado como "punto de partida" para una Carta Magna "mejor".
"Frente a aquellos que se autoproclaman constitucionalistas, hay que decir en primer lugar que son los mismos que violan diariamente buena parte de los artículos de la Constitución", ha denunciado.
Ha recordado que en países del entorno europeo como Alemania, la Constitución se ha cambiado "unas 60 veces" en los últimos años, pero en España sólo se han llevado a cabo dos reformas puntuales y, una de ellas, en 2011, para "meter la marca de ganado de los bancos extranjeros".
El portavoz del PNV, Aitor Esteban, que tampoco se ha sumado a la celebración del 38 aniversario de la Constitución al igual que el resto de partidos nacionalistas, ha advertido en Bilbao de que no cuenten con ellos para realizar una reforma de la Constitución si no da solución a las aspiraciones nacionales del País Vasco y Cataluña.
"No nos hemos identificado nunca con esta Constitución porque el PNV es un partido vasco y cree en la nación vasca, el pueblo más antiguo de Europa, y queremos ser reconocidos como nación", ha avisado.