POLÍTICA SOBERANISMO
Quinielas para suceder a Puigdemont
Munté evita descartarse como recambio del President y dice que ahora no toca ese debate|| Junqueras respeta la decisión jefe del Executiu pero centra la atención en el referéndum
La negativa del President de la Generalitat, Carles Puigdemont, a encabezar el PDECat en las próximas elecciones catalanas, reiterada este jueves, ha abierto la carrera sucesoria en el partido que debería tener designado un candidato para la Generalitat y Barcelona ante la posibilidad de un adelanto electoral si presupuestos y referéndum no salen adelante.
En este sentido, la portavoz del Govern y vicepresidenta del PDECat, Neus Munté, consideró ayer lógico que su nombre suene como posible candidata a la Presidencia de la Generalitat si hay nuevos comicios en Catalunya, pero rechazó posicionarse sobre la cuestión. “No quiero perder el tiempo con quinielas y nombres” ,afirmó la también consellera de Presidencia, que reconoció que “es verdad que mi nombre suena pero yo lo llevo con mucha normalidad porque entiendo que está justificado por el hecho de que estoy muy cerca del President Puigdemont”.
Pide a PDECat y ERC implicarse en la elaboración de los presupuestos del Estado
Munté dijo ver estas hipotéticas elecciones con una cierta distancia puesto que no hay comicios convocados, sobre los que espera que tengan carácter constituyente y se celebren tras el referéndum que prevé realizar el Govern en septiembre. “Cuando esto esté situado en el calendario, en el horizonte, todas las formaciones, también la mía, tendrán que elegir a su candidato y a sus mejores equipos”, afirmó.
Por su parte, el vicepresident del Govern, Oriol Junqueras, mostró “todo el respeto del mundo” a la decisión de Puigdemont de no ser presidente en un año porque su proyecto es que se vote un referéndum y luego convocar elecciones constituyentes. Junqueras evitó desvelar si él sería candidato en unas hipotéticas elecciones, ya que ahora están centrados en “ganar y aplicar” el referéndum. El líder de ERC pidió ir “ paso a paso”, sin desviarse del objetivo principal de la consulta y trabajar porque “las cosas salgan bien”. “No tenemos tiempo de abocar las fuerzas en otros escenarios”, insistió. Paralelamente, afirmó que quieren la “máxima convivencia y respeto mutuo” porque las mejores relaciones entre Catalunya y España serán “con una República independiente”.
El vicepresident consideró también que el Govern está haciendo muy bien su trabajo y que lo están llevando a cabo “en unas circunstancias muy adversas”.
La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, por su lado, aseguró que el referéndum “se celebrará seguro”, apuntando que si la hoja de ruta independentista cumple los plazos previstos no volverá a presentarse en ninguna lista para las próximas elecciones. Forcadell también desestimó la posibilidad ser candidata a la Generalitat. “Me presenté en las últimas elecciones porque eran unas circunstancias especiales”, aseveró.
Por otro lado, el presidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sànchez, afirmó que el 50%+1 de los votos son suficientes para validar un referéndum de independencia. Sànchez defendió que para el reconocimiento de la consulta de independencia no se contemple un techo de participación y avisó que la abstención no la deslegitimará.
Gabriel insistió, al contrario que el President Puigdemont, en que si no se aprueban los presupuestos “no hay motivo para acabar la legislatura o convocar elecciones”. Relajó así la presión sobre los cupaires que decidirán, en un consejo político el 17 de enero, si votan a favor de la propuesta del Govern o no. Gabriel afirmó también sobre las cuentas de la Generalitat que “hay elementos que nos inquietan mucho”, y añadió que “la militancia está analizando las demandas hechas y las medidas adoptadas”.
Rabell insistió en que “no tendría sentido una convocatoria unilateral” y dijo que se debe de seguir trabajando por un amplio consenso para su celebración. Además evitó responder si acudirá a votar de celebrarse este referéndum de forma unilateral.
Por otro lado, la líder de C’s y jefa de la oposición en el Parlament, Inés Arrimadas, dijo ayer que respeta la decisión de Puigdemont de no presentarse a las elecciones pero criticó que el President “no tiene un proyecto para Catalunya más allá de repetir el 9N”. En la misma línea, se expresó el secretario general de C’s, Matías Alonso, que consideró que Puigdemont “se ve con pocas fuerzas para seguir” y que quizás está “fatigado” por el proceso soberanista.
En otro orden, el delegado del Gobierno central, Enric Millo, llamó a PDCat y ERC a que se “impliquen” en la negociación y posterior aprobación de los presupuestos del Estado para 2017, que aseguró que reflejarán con “hechos” la voluntad de diálogo del Gobierno con Catalunya.