TRAGEDIA POLÉMICA
Cospedal asume que Defensa fue responsable del siniestro del Yak-42
Asegura a los familiares que buscará “por tierra, mar y aire” el contrato del avión || Las víctimas califican de “oro moral” su compromiso de abrir una investigación
La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, se comprometió ayer a investigar la gestión del accidente del avión Yak-42, en el que murieron 62 militares, y asumió el dictamen del Consejo de Estado que responsabiliza del siniestro a este departamento, entonces dirigido por Federico Trillo.
Cospedal y los responsables y juristas de la Asociación de familiares de víctimas del Yak-42 se reunieron durante hora y media, días después de que el informe del Consejo de Estado diera la razón a los familiares afirmando que el avión nunca debió volar, declara la responsabilidad patrimonial de Defensa y advierte de la existencia de irregularidades en las contrataciones de vuelos para el transporte de tropas a misiones internacionales.
En este sentido, Cospedal se compromete, según los familiares, a buscar “por tierra mar y aire” el contrato del avión y de los 42 vuelos anteriores así como de la documentación relativa a la póliza de seguro del vuelo que pagó España.
Al término de la reunión, a puerta cerrada, Defensa afirmó en un comunicado que Cospedal trasladó a los familiares de las víctimas que su departamento seguirá el dictamen del Consejo de Estado, aunque no sea vinculante para el Ejecutivo.
Les transmitió su máxima disposición a colaborar en sus peticiones y su “compromiso inquebrantable con el recuerdo y la memoria de las víctimas por parte del ministerio de Defensa, del Gobierno y de toda la sociedad española”.
La Asociación de familiares de víctimas del Yak-42 calificó como “oro moral” y “alivio” la decisión de Defensa, y su presidente, Miguel Sencianes, se declaró satisfecho con la reunión.
Para esta asociación supone un “cambio radical” en el enfoque de la gestión del accidente llevada hasta ahora por Defensa y pone el “marcador a cero” en el proceso abierto en 2004.
El vicepresidente de la Asociación, Francisco Cardona, y la familiar de una de las víctimas, Curra Ripollés, dijeron que “aunque la palabra perdón no salió en la reunión, con la intención mostrada por Cospedal de esclarecer los hechos nos vale a las familias”. Por su parte, Trillo afirmó que “todo lo que haga el Gobierno le parece correcto”.