PARTIDOS POLÍTICA
Iglesias quiere un Podemos de activistas y Errejón, volver al origen
Las dos líneas de la formación acentúan sus diferencias al mostrar sus proyectos
Los militantes de Podemos ya pueden comparar negro sobre blanco las diferencias que existen entre las estrategias políticas que defienden los dos principales dirigentes del partido, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, quienes ayer pusieron sobre el papel los puntos que les alejan y los que les acercan. Ambos presentaron ayer los borradores de documentos que pretenden llevar a la Asamblea Ciudadana de febrero y que ahora entra en fase de debate y recogida de aportaciones.
Iglesias, convencido de que Podemos ya no puede ser el mismo partido que surgió hace tres años y debe estar presente en el todos y cada uno de los “conflictos sociales”, llega a esta etapa con la intención y la voluntad de lograr la unidad e integración de todos los sectores de Podemos.
Y Errejón mantiene la pretensión de convencer de que hay que volver al Podemos original, que deje atrás las etiquetas izquierda-derecha, que recupere la línea de una fuerza patriótica popular, le hable a la gente sin preguntarle de dónde viene y que no se arrincone en la izquierda.
El plan del secretario general de cara a Vistalegre II es toda una estrategia para “ganar” las elecciones en 2020 a la Moncloa: trabajar “a la ofensiva” con diputados que no sean políticos sino “activistas institucionales” y que mantengan la tensión en la institución y en la calle canalizando la lucha social. Entre sus objetivos, revalidar las victorias en los ayuntamientos del cambio y ampliarlas a más municipios y comunidades autónomas que tienen elecciones en 2019. Apuesta por crear “un Gobierno en la sombra”, al estilo inglés: un grupo de perfiles políticos y técnicos que trabajen ya en las políticas públicas de un futuro Ejecutivo.
Propuesta que choca con los planes de Errejón, quien ya ha dicho que su apuesta es demostrar “solvencia y madurez” en el Parlamento más que por poner “cargos ficticios” a personas concretas. En contra de lo que afirma Iglesias, Errejón mantiene que nos encontramos ante un Gobierno del PP “débil” y que Podemos debe aprovechar la crisis del PSOE para liderar una nueva mayoría. Frente a quienes abogan por “cavar trincheras” y encerrarse en la protesta, defiende la necesidad de pasar a la ofensiva y dar un paso adelante.
En esta línea, defiende que la próxima Asamblea Ciudadana debe servir para “corregir el rumbo de los últimos meses”, abandonar el “folclore”, los golpes de efecto y la “inmadurez”, volver a disputar el “sentido común” y recuperar la iniciativa política sin arrinconarse en la izquierda.