POLÍTICA EEUU
Donald Trump sugiere la posibilidad de levantar las sanciones a Rusia
El presidente electo pide al Kremlin colaboración contra el terrorismo || El Gobierno chino reitera a EEUU que el principio de la “China única” es “innegociable”
El presidente electo de EEUU, Donald Trump, ha abierto la posibilidad de levantar las sanciones a Rusia impuestas por el todavía presidente, Barack Obama, si el Kremlin colabora en la lucha contra el terrorismo y en otros objetivos.
En una entrevista en The Wall Street Journal publicada este viernes, Trump aseguró, sin embargo, que mantendrá intactas las sanciones “al menos por un tiempo”. El magnate se refirió así a las medidas económicas contra organismos y empresas rusas que Obama impuso antes de finalizar 2016 como represalia por la supuesta injerencia del Kremlin en los pasados comicios presidenciales en EEUU.
El presidente electo también reiteró su disposición a reunirse con el jefe del Estado ruso, Vladimir Putin, tras su toma de posesión el 20 de enero. En la entrevista, Trump también fue preguntado por la política de “una sola China” de Pekín, que Washington reconoce desde que en 1979 rompió sus relaciones diplomáticas con Taiwán, y respondió que “todo es negociable”. Puso como condición a Pekín para mantener la política de “una sola China” que muestren cambios en sus políticas monetarias y de comercio.
El Gobierno chino, por su parte, advirtió a EEUU de que el principio de una “China única”, que contempla los derechos de soberanía del gigante asiático sobre Taiwán y las islas del mar de la China meridional, es innegociable y hay que reconocer la importancia que tiene como pilar en las relaciones entre ambos países.
Por otro lado, el presidente saliente, Barack Obama, dedicó un elogio sin paliativos al pueblo estadounidense en su discurso semanal de ayer, el último de su mandato antes de ceder el poder a Trump, y en el que pidió a los norteamericanos que “jamás den por sentada la democracia”.
En otro orden, varios congresistas demócratas anunciaron ayer que se ausentarán en la toma de posesión de Trump rompiendo así con una tradición histórica del Congreso de EEUU. El magnate arremetió contra los parlamentario, y acusó a uno de ellos, el congresista y líder de derechos civiles John Lewis,
de solo “hablar, hablar y hablar”.