PANORAMA
Miles de mujeres de todo el mundo protestan contra el machismo del presidente de EEUU
La marcha más multitudinaria, en Washington, tuvo medio millón de participantes || Las organizaciones convocantes señalan que su llegada a la Casa Blanca es una “amenaza” a los derechos de las féminas
Centenares de miles de mujeres se manifestaron ayer en numerosas ciudades de todo el mundo, desde Sídney (Australia) hasta Pekín (China), en defensa de sus derechos y en protesta por la investidura de Donald Trump como presidente de EEUU, en una movilización histórica y global que concentró en Washington a medio millón de personas.
La principal protesta se celebró en la capital estadounidense justo un día después de la investidura de Trump, cuya llegada a la Casa Blanca ha sido recibida como una “amenaza” a los derechos de las mujeres, según denunciaron las organizaciones convocantes.
En las protestas había caras famosas como Scarlett Johannson, Ashley Judd, Michael Moore o John Kerry
En la marcha de Washington participaron actrices como Scarlett Johanson, Ashley Judd y América Ferrera, así como el cineasta Michael Moore.
Uno de los emblemas de la marcha fueron los gorros “pussy cat” (gatito), que se cuentan por miles y son una respuesta al polémico comentario de Trump de que a las mujeres hay que agarrarlas por sus partes íntimas (“pussy”, en inglés).
La marcha, en la que también participó el exsecretario John Kerry, surgió del impulso feminista de un grupo de jóvenes que no podían creer que un candidato que había sido acusado de acoso sexual por varias mujeres y pronunciado comentarios denigrantes sobre ese género ganase las elecciones de noviembre pasado.
A la convocatoria de Washington se habían sumado más de 600 ciudades de todo el mundo, con especial incidencia en Europa en ciudades como París, Londres, Barcelona, Madrid o Roma. En Barcelona, varios centenares de mujeres se manifestaron en una marcha sin incidentes por el centro de la Ciudad Condal que contó con la presencia de mujeres estadounidenses que residen en Catalunya y en las Islas Baleares.
Washington
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó su primera orden ejecutiva como nuevo mandatario del país, por la que anima a los estados a eliminar los aspectos que consideren más costosos de la aplicación de la reforma sanitaria de su predecesor, Barack Obama, la ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, conocida vulgarmente como ‘Obamacare’, que ha dado cobertura a 20 millones de personas
La orden tiene carácter vinculante pero su impacto es simbólico, ya que la administración Trump ya ha avanzado que no tomará medidas prácticas a este respecto hasta que no desarrolle un plan que pueda sustituir en su totalidad a la reforma sanitaria. En cualquier caso, Trump indicó que, en virtud del deber de su administración de tomar “todas las medidas que permita la ley para minimizar las injustificadas cargas económicas y regulatorias” de la reforma, pidió a las agencias del Gobierno que permitan a los estados “más control y flexibilidad para crear un mercado sanitario más libre y abierto”.
Es decir, las agencias federales deberán proporcionar ayuda a las autoridades de cada estado a eliminar algunos aspectos económicos especialmente gravosos de la ley, entre ellos el mandato que obliga a la mayor parte de los estadounidenses a adquirir un seguro médico, una de las facetas menos valoradas de la reforma de Obama.
Los expertos temen que esta decisión haga descarrilar el mercado de pólizas de seguros individuales, “incrementando el precio medio” de las mismas.
En este sentido, fuentes próximas al partido Republicano reconocieron que todavía no es el momento de tomar decisiones drásticas.
Por otra parte, Trump visitó las instalaciones de la CIA en Langley (Virginia) en su primer día completo como presidente.