INVESTIGACIÓN
La jueza envía a prisión a Rosell y deja en libertad a su socio de Alàs
También decreta cárcel para el abogado andorrano del expresidente del Barça Joan Besolí||La magistrada cree que los acusados blanqueaban comisiones ilegales
El furgón que trasladó al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell a la Audiencia Nacional.
La jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela decretó este jueves prisión incondicional para el expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell y para su abogado y presunto testaferro en Andorra Joan Besolí, a quienes considera integrantes de una organización criminal con ámbito transnacional dedicada a blanquear capitales procedente de comisiones ilícitas. Asimismo la magistrada deja en libertad al socio de Rosell de Alàs, Andreu Ramos.
Después de que el exdirigente culé y Besolí hubieran declarado ante la magistrada, ambos fueron enviados a prisión de manera incondicional porque en los dos casos concurren riesgo de destrucción de pruebas, de fuga y de reiteración delictiva.
Para la titular del juzgado Central de Instrucción número 3, sobre Rosell y Besolí existe riesgo de fuga “innegable” debido a que cuanto más graves son los delitos y las penas, “más intensa cabe presumir la tentación de la huida”.
Por otra parte, la Audiencia Nacional también acordó dejar en libertad con cargos a Shane Ohanessian y Andreu Ramos, cuñado de Joan Besolí. Los dos deberán comparecer mensualmente ante el juzgado. Además tienen prohibido salir del Estado español y se les ha retirado el pasaporte.
En el auto, la magistrada explica que los investigados formaban una red dedicada a blanquear dinero procedente de comisiones ilícitas derivadas de la venta de los derechos de la selección brasileña de fútbol a una mercantil árabe con sede en islas Caimán, cuya denominación social es International Sports Events (ISE). Todo ello a través de un entramado de sociedades y cuentas principalmente en el Principat de Andorra.
Según relata Lamela, en noviembre de 2006, Ricardo Teixeira, en su condición de presidente de la Confederación de Fútbol Brasileño firmó un contrato con ISE para obtener los derechos de 24 partidos de la selección brasileña. Como consecuencia de esta operación, impuso a la compradora el pago de unos fondos de los que se apoderaron Rosell y Teixeira. La juez explica que el exdirigente culé ingresó por esta acción más de seis millones y medio de euros. Además habría percibido otros 8,3 millones a través de una firma andorrana.
