SUCESOS
Las llamas consumen Portugal
El incendio más mortífero de la historia del país sigue expandiéndose || El número de víctimas sube a 63 y podría aumentar cuando se logre llegar a zonas cercadas por el fuego
Más de 2.000 efectivos continuaban este lunes luchando contra el incendio que arrasa el centro de Portugal desde el sábado, dejando a su paso al menos 63 muertos y un paisaje desolador en un país impactado ante la magnitud de la tragedia.
El fuego, que arrancó el sábado por la tarde en el municipio de Pedrógão Grande, en el distrito de Leiria, se ha extendido también a los de Castelo Branco y Coimbra, y mantenía este lunes cuatro frentes activos. El número de víctimas mortales subió a 63 con la muerte de un bombero. Según el último balance oficial ofrecido por la ministra de Administración Interna, Constança Urbano, el incendio deja además otros 62 heridos, varios de ellos de gravedad.
De momento han sido identificadas 24 de las víctimas mortales en el grave siniestro
Los efectivos terrestres todavía no lograron este lunes acceder a algunas aldeas cercadas por el fuego y la baja visibilidad dificultaba el trabajo de los medios aéreos, especialmente en las primeras horas del día, en una zona en la que las temperaturas rondan los 38 grados, con viento de moderado a fuerte. “Es necesario llegar a todo el territorio para ver si hay más víctimas en las pequeñas aldeas”, repartidas por la Sierra de Lousã y la cuenca del río Zezere, dijo Rui Rocha, alcalde de la localidad de Ansião, una de las afectadas por las llamas.
Una conjugación extraordinaria de factores adversos, como ya había ocurrido en el año 2003, desató el sábado un mar de llamas incontrolable. La versión que manejan las autoridades lusas apunta a que el fuego se inició por el impacto de un rayo en un árbol seco que, con temperaturas de 40 grados, fuertes vientos, ayudaron a propagar las llamas. Sumado a esto, la caída de líneas de alta tensión generaron más focos de ignición.
A pesar de que los portugueses están acostumbrados a sufrir numerosos incendios cada verano –es el país de la Unión Europea más afectado por las llamas en este siglo–, la magnitud de esta tragedia les mantiene impactados.
Muchos siguen sin entender cómo el fuego pudo expandirse con tanta rapidez, cercando aldeas enteras y una carretera que une los municipios de Figueiró dos Vinhos y Castanheira de Pera, donde treinta personas murieron atrapadas dentro de sus vehículos.
La ayuda para combatir las llamas no solo proviene de todas partes de Portugal sino también de fuera de las fronteras lusas.El primer país en reaccionar fue España, desde donde el domingo a primera hora ha ido proporcionando tanto medios aéreos como humanos para combatir este incendio. A través del mecanismo de protección de la UE, Francia e Italia también han enviado medios aéreos a la zona.
Las claves
- Víctimas. El número de víctimas mortales subió este lunes a 63 con la muerte de un bombero que permanecía ingresado en estado muy grave. El incendio deja otros 62 heridos, varios de gravedad.
- Causas. La versión que manejan las autoridades lusas apunta a que el fuego se inició por el impacto de un rayo en un árbol seco en la tarde del sábado, con altas temperaturas, fuertes vientos que ayudaron a propagar las llamas, sumado a la caída de líneas de alta tensión han generado más focos de ignición.
- Ayuda española. España ha enviado seis aviones para la lucha contra el fuego. Además, para la extinción en tierra están interviniendo sobre el terreno 100 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y 25 bomberos de la Comunidad de Madrid, con la correspondiente dotación de equipos terrestres. Francia e Italia también han enviado diversa ayuda a la zona.