EEUU ESCÁNDALO
Los correos del hijo de Trump le implican a fondo en el ‘Rusiagate’
Los emails de Donald Trump JR demuestran que sabía que los datos de Hillary venían de Moscú || Ante información comprometedora respondió: “Me encanta”
Donald Trump Jr., hijo mayor del presidente de EEUU, se encuentra en el ojo del huracán por el “Rusiagate”, el escándalo sobre la intervención de Moscú en las elecciones que auparon a su padre. El hijo del magnate reveló ayer unos correos electrónicos en los que se desvela cómo se gestó su reunión con una abogada rusa en junio de 2016 para recibir información para dañar a Hillary Clinton. Afirmó en Twitter que quiere ser “totalmente transparente” sobre cómo y por qué se gestó su encuentro con la abogada rusa Natalia Veselnitskaya, celebrado el 9 de junio de 2016 en la Torre Trump de Manhattan y revelado hace unos días por The New York Times.
Donald Jr. publicó los correos tras ser advertido por el Times de que los tenía y de su inminente divulgación, y en ellos se evidencia que el primogénito de Trump buscó acceder a información para perjudicar a la demócrata Clinton, rival de su padre en la contienda por la Casa Blanca, sobre la que se le dijo expresamente que era una ayuda del Gobierno ruso.
En uno de esos correos, Rob Goldstone, el publicista que preparó la reunión con Veselnitskaya, advierte a Trump Jr. de que iba a recibir “algunos documentos oficiales e información que podrían incriminar a Hillary Clinton y sus relaciones con Rusia”, y que serían “muy útiles” para su padre. “Se trata obviamente de una información de muy alto nivel y sensible, pero es parte del apoyo de Rusia y su Gobierno al señor Trump”, agrega Goldstone en el correo.
La respuesta de Donald Jr. a ese correo, fechado el 3 de junio de 2016, es la siguiente: “Si es lo que dices me encanta, especialmente más adelante en el verano”.
La inteligencia estadounidense concluyó hace tiempo que Moscú orquestó una estrategia de ciberataques para interferir en el resultado electoral en favor de Trump, algo que el presidente ha puesto en duda reiteradamente al hablar de “caza de brujas” en su contra e insinuar que “nadie sabe con certeza” si hubo injerencia de Rusia o de otros países. Poco antes de la divulgación de los correos, Veselnitskaya negó cualquier vínculo con el Kremlin y también tener información comprometedora sobre Clinton.