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La Generalitat firma el Pacto de la Reforma Horaria

Carles Puigdemont ha encabezado esta mañana la firma del Pacto para la Reforma Horaria, una iniciativa que quiere impulsar los cambios horarios para disfrutar de más libertad en la gestión de nuestro tiempo

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El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado esta mañana que “llegar a pactos de envergadura, que son transformadores y generan cambios profundos en una sociedad, no es nunca sencillo, ni cosa de pocos, y pide mucho tiempo”; pero sobre todo “requiere una condición indispensable y es tener la voluntad de llegar, sin eso es imposible”, ha declarado.

Carles Puigdemont se ha expresado así en el transcurso de la firma, esta mañana en el Palau de la Generalitat, del Pacte per a la Reforma Horària, que cuenta con el apoyo de más de cien entidades e instituciones de todo el país. Este acuerdo es un compromiso para alcanzar lo que se llama Objetivo 2025, que tiene que permitir que en Catalunya, en los próximos años, nos equiparemos con una serie de indicadores europeos, y conseguir así que las personas puedan vivir unos horarios más racionales y saludables. Por parte del Gobierno ha firmado al consejero de la Presidencia y portavoz, Jordi Turull.

También han firmado el documento Robert Serentill, presidente de Grupo SEGRE, en representación de la Associació Catalana de Radio y Joan Cal, Director Ejecutivo de Grupo SEGRE, en representación de la Associació Catalana de Televisions de Proximitat.

En el transcurso de su intervención, el jefe del Ejecutivo ha agradecido el esfuerzo “de toda aquella gente que ha hecho posible este Pacto”, porque, ha resaltado, para llegar a un acuerdo “hace falta generosidad por parte de todo el mundo, la generosidad de moverse, de entender que las razones del otro también son importantes”. Y ha continuado "y hace falta finalmente el coraje para aplicar los resultados y no desdecirse de los compromisos a las primeras dificultades, buscando aquel refugio fácil en las ideas primeras que eran previas al acuerdo”. “Hacen falta tiempo, paciencia, y voluntad de ir verificando los acuerdos para ir creciendo”, ha insistido.

Para el presidente, “todo pacto empieza por el reconocimiento que tenemos un problema, y en el caso del tiempo lo tenemos de cómo lo distribuimos”, ha dicho en referencia al Pacto para la reforma Horaria. “Malbaratamos el tiempo, y lo hacemos en una sociedad que ya malbarata alimentos, energía, recursos,” ha afirmado, y ha añadido “somos conscientes de que no podemos continuar así porque no tendremos futuro”.

Carles Puigdemont ha puesto de relieve en su discurso el hecho de que “estamos en las puertas de una revolución industrial, que generará cambios profundos en el seno de nuestra sociedad y en nuestra vida, y tendrá impacto directo en el tiempo, en la manera de relacionarnos,” por eso, ha hecho un llamamiento a aprovechar al máximo estos cambios, a incorporar los beneficios humanos que se deriven, “adaptándonos antes de que nos adapten, porque si escogemos la manera como lo hacemos, podemos ser soberanos ante la adaptación, sino seremos adaptados con todas las consecuencias, no necesariamente buenas”.

El Pacto para la Reforma Horaria es el resultado de tres años y medio trabajos de expertos y del acuerdo de todos los agentes implicados de diferentes ámbitos como el comercio, la Administración, el trabajo, la sanidad, la cultura o la educación.

La carta de compromisos hacia el objetivo 2025, que se incluye en el Pacto para la Reforma Horaria, contempla, entre otros, el siguientes propósitos: recuperar las dos horas de desfase horario en relación en el resto del mundo; impulsar una nueva cultura del tiempo a las organizaciones a favor de modelos más eficientes y más flexibles para atender las nuevas necesidades sociales, y consolidar el factor tiempo como nueva medida de libertad, equidad y bienestar.

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