CORRUPCIÓN CASO PALAU
Millet dice que no sabe dónde están los 10 millones que faltan del Palau
Afirma que mucha gente cobraba en negro y niega estar preocupado por la sentencia del caso || Insiste en su mal estado de salud y asegura que apenas puede caminar
El expresidente del Palau de la Música Fèlix Millet aseguró ayer que desconoce donde están los 10 millones de euros desviados del Palau de la Música que aún no han aparecido.
“¿Los diez millones que faltan? No lo sé. Dios me libre. Si lo supiese ya lo hubiese dicho. No sé si han hecho bien los números. Había mucha gente que cobraba en negro”, señaló Millet en una breve conversación telefónica en un programa de Catalunya Ràdio.
El expresidente del Palau no quiso opinar sobre la posibilidad de que pueda acabar en la cárcel y sobre la sentencia del juicio del caso Palau aseguró que no está preocupado. “Dicen que saldrá en septiembre u octubre. No tengo ni idea. Que salga cuando Dios quiera. Estoy esperando a ver que dicen como cualquier otro”, afirmó Millet.
Aprovechó el eco de la radio para reiterar que no se encuentra bien de salud y que no puede salir de casa. “Estoy mal de la espalda y a duras penas camino 10 o 20 metros”, lamentó el expresidente de la entidad cultural. “Tengo 82 años y los años no perdonan. No puedo ni nadar. Si tengo calor me tengo que meter en la piscina como si me duchara”, añadió.
En el caso Palau se juzga la supuesta financiación irregular de Convergència Democràtica de Catalunya a través del Palau de la Música durante la época en la que Fèlix Millet y su mano derecha, Jordi Montull, estaban al frente de la institución cultural. Están acusados de saquear más de 30 millones de euros.
Para desviar este dinero hacia el partido, el fiscal del caso, el leridano Emilio Sánchez Ulled, considera que usaron las donaciones que la empresa Ferrovial hacía al Palau, de quien eran patrocinadores. Este dinero sería el “peaje” que la constructora pagaría para obtener la adjudicación de obras públicas.
Además tanto Millet como Montull, según el fiscal, habrían utilizado fondos del Palau para gastos personales, como por ejemplo, para sufragar la boda de Gemma Montull, hija de Jordi Montull y también acusada en el juicio.
Por parte de CDC está acusado el extesorero Daniel Osàcar, que sería el encargado de hacer llegal el dinero de Ferrovial desde el Palau hasta su partido.
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