Alud de críticas a Trump por su leve condena a los supremacistas blancos

La respuesta del presidente de EEUU, Donald Trump, a los choques entre supremacistas blancos y grupos opositores en Charlottesville (Virginia), que dejaron un muerto de forma directa (dos policías murieron al estrellarse el helicóptero con el que vigilaban los disturbios), generó este domingo una lluvia de críticas por entenderse que la condena no estuvo a la altura. No mencionó a los supremacistas blancos, no asumió culpas y no lanzó mensajes excesivamente duros.

Trump se pronunció primero en Twitter. “Todos debemos estar unidos y condenar todo lo que significa el odio. No hay lugar para este tipo de violencia en Estados Unidos. Vayamos todos a una”, dijo. Más tarde, compareció en una rueda de prensa donde condenaba “en los términos más fuertemente posibles” el odio, intolerancia y violencia. “Viene de todos lados”, apuntó, con lo que no responsabilizaba a un grupo en concreto.

Un portavoz de la Casa Blanca aseguró que Trump declaró que el presidente Trump incluía la condena a los “supremacistas blancos” en su mensaje contra el “odio” a raíz de los sucesos de Charlottesville.

Mientras, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Herbert McMaster, denunció que el atropello cometido el sábado por supremacista contra una marcha antifascista en Charlottesville, que acabó con la muerte de una joven, se trata de un “acto terrorista”.

Por su parte, el expresidente Barack Obama y la excandidata presidencial Hillary Clinton, principales exponentes del Partido Demócrata, apelaron a luchar contra el odio tras los episodios de violencia racial del sábado en el estado de Virginia.

Seúl, abierto al diálogo con Corea del Norte para solucionar la crisis Corea del Sur manifestó este domingo que dejará la puerta abierta al diálogo con Pyongyang, con la finalidad de solucionar la crisis y reducir todo lo posible la creciente tensión desatada en la península en los últimos días. Mientras, el gobierno de EEUU ha enviado al jefe del Estado Mayor Conjunto del ejército, el general Joe Dunford, a una gira que le llevará a China, Japón y Corea del Sur para tratar el desplante nuclear de Corea del Norte y coordinar sus posturas para que “no haya errores de cálculo”.