ESNOTICIA
Una manifestación multitudinaria con banderas de todos los colores e ideologías
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“No tinc por” fue ayer la frase más repetida en un desbordado Passeig Gracia de Barcelona, donde varios cientos de miles de personas se reunieron bajo este lema con carteles y rosas (uno de los símbolos históricos de las Ramblas) repartidas por decenas de voluntarios con los colores de la ciudad –blanco, rojo y amarillo– para rechazar el terrorismo. Empezaron a caminar en los Jardinets de Gràcia, desde donde bajaron por el Passeig Gràcia hasta el escenario instalado en la plaza Catalunya, en el que a las 18.40h, cuando llegó la cabecera, empezó el acto protagonizado por la actriz Rosa Maria Sardà y la portavoz de Ibn Batuta, Míriam Hatibi. (ver pág 5). La cabecera estuvo protagonizada por 75 representantes de todos los cuerpos de seguridad -Mossos, Policía Nacional, Guardia Civil y policías locales- y de emergencias, así como de entidades ciudadanas que tuvieron un papel destacado el 17 de agosto. Justo detrás y antes de las filas destinadas a los políticos y representantes institucionales había una segunda cabecera con representación ciudadana en la que destacaba la presencia de familiares de las víctimas de los atentados. Antes de las 18.00 horas, momento en que empezó la manifestación, el sonido más escuchado en esta céntrica avenida era el de los aplausos espontáneos a los miembros de diferentes cuerpos de seguridad y emergencias. Una acogida diferente dispensaron a algunas de las autoridades políticas, como el rey Felipe VI, o el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que al incorporarse recibieron abucheos y gritos de “fuera, fuera!”De hecho, entre el público se vieron pancartas críticas con la monarquía y el gobierno por su política armamentística y sus relaciones internacionales.El resto de carteles se centraban en el rechazo a la violencia y al terrorismo, con lemas como “No a las guerras”, y también se vieron ver numerosas camisetas con la palabra Barcelona, donde la “l” se cambió por un crespón negro.“Estamos aquí para mostrar nuestro pésame a quienes han perdido a familiares o seres queridos, y también para demostrar que no tenemos miedo y no podrán con nosotros”, explicó Montse, una de las manifestantes. A lo largo del paseo de Gracia también se vieron banderas, muchas independentistas y algunas españolas, y en momentos se vivió cierta tensión, sin llegar a mayores. También ondearon algunas con el Arco Iris e, incluso, una de Pakistán, que llevaba la entidad Centro Islámico Camino de la Paz, manifestándose con el eslogan “El terrorismo no tiene religión. Islam quiere decir paz”. “Estamos aquí para rechazar todo tipo de violencia como catalanes que somos. A los musulmanes nos afecta de la misma forma, y somos y seguimos siendo las primeras víctimas de este terrorismo”, destacó uno de los portavoces, Naveed. También acudieron a la marcha plataformas antisoberanistas como Societat Civil Catalana, con una pancarta bajo el lema “Unidos frente al terrorismo”. Asimismo, se pudo apreciar como una colla castellera formó un gran castell frente a la emblemática Pedrera, en lo alto del cual se mostró una vez más una pancarta con el lema “No tinc por”. Para garantizar la seguridad de los viandantes se utilizaron autobuses de la ciudad para cortar, atravesados, las grandes arterias viarias. La de ayer era la tercera gran manifestación contra el terrorismo en Barcelona, tras las de los atentados a manos de ETA de Hipercor, en 1987, y de Ernest Lluch en 2000.