ESNOTICIA
Padres defienden que el Albert Vives no adoctrina
Inician una recogida de firmas para apoyar al colegio || Un juez ve “indicios de humillaciones” al hijo de una guardia civil
Madres y padres del colegio Albert Vives de La Seu d’Urgell han iniciado una recogida de firmas para apoyar a la dirección y a los profesores del centro, después de que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 del municipio haya abierto una investigación por un presunto delito de incitación al odio contra el director y dos docentes. Tal como publicó este diario, el juez abrió la investigación después de que algunas familias denunciaran humillaciones al hijo de una agente de la Guardia Civil tras el 1-O. Los promotores de la iniciativa ven esas denuncias “sin fundamento”, defienden que el centro siempre ha tratado con “respeto” a todos los alumnos y ofrecen su “apoyo incondicional al colegio”.
El documento de la recogida de firmas señala que las madres y padres, “de diversos orígenes, creencias y culturas, queremos manifestar nuestro total apoyo a la escuela, a su dirección y a todo el profesorado ante las calumnias e injurias que está sufriendo a raíz de unas denuncias realizadas sin fundamento”. Asimismo, añade que “la escuela Albert Vives ha tratado siempre a todos nuestros niños y niñas con el máximo respeto a su diversidad y nunca ninguno se ha sentido violentado por ninguna manifestación de ningún miembro de del profesorado de índole ideológica y/o política”.
Los promotores de la recogida de firmas afirman que el centro ha respetado al máximo la “diversidad”
Por su parte, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de La Seu d’Urgell asegura en las diligencias que “podría ser que varios profesores y el director incitaran de manera directa a sus alumnos, de edades muy tempranas y en consecuencia maleables por quien tiene un principio de autoridad hacia ellos, a la comisión de hechos mínimamente concretados en los que se pueda predicar la discriminación, el odio, la hostilidad o la violencia contra grupos o asociaciones”. Uno de los estudiantes habría sufrido “humillaciones, insultos e incluso agresiones” porque su madre es guardia civil, lo que conocen el resto de compañeros y profesores.
Las denuncias presentadas por las familias en el cuartel de la Guardia Civil son del pasado día 6 de octubre y el auto del juez, del día 9.