JUICIO SANFERMINES
La fiscal mantiene que “La Manada” violó a la joven de forma conjunta
Las acusaciones, en la misma línea, no dan veracidad a la versión de los acusados
La fiscal Elena Sarasate aseguró ayer que “los hechos se produjeron sin consentimiento y con violencia”, en una nueva sesión del juicio por la supuesta violación de una joven madrileña de 18 años en los Sanfermines de 2016. Asimismo insistió en que los integrantes de “La manada” actuaron “de forma conjunta y organizada” y que tras la violación dejaron a la víctima “tirada y semidesnuda”.
Además, la fiscal se mostró convencida de la veracidad de la declaración de la joven y añadió que la versión de los hechos proporcionada por los acusados presenta contradicciones “determinantes”.
A la vista de estas conclusiones, el abogado de la acusación, Carlos Bacaicoa, afirmó que “el asunto se va a ganar”. Sin embargo, el letrado de tres de los encausados, Agustín Martínez Becerra, expresó su disconformidad con la declaración de la fiscal ya que, en su opinión, “ha omitido muchísimos datos que forman parte de la causa”.
Tanto la acusación particular como los abogados del Ayuntamiento de Pamplona y del Gobierno de Navarra, personados en la causa, coincidieron en líneas generales con el planteamiento de la fiscalía. A este respecto, el letrado del ejecutivo navarro dio “mínima credibilidad” a los acusados y defendió que los hechos “pueden calificarse de agresión sexual, delito contra la intimidad y robo con fuerza”. Además, el abogado remarcó la especial vulnerabilidad de la joven por su edad y situación.
En la misma línea, Víctor Sarasa, abogado del consistorio pamplonés, aseveró que “los hechos son palmarios, la situación no fue buscada por la víctima, que por supuesto se sintió intimidada, y nunca manifestó ningún tipo de consentimiento”. Igualmente, este letrado consideró probado que “no hay el menor atisbo de voluntariedad por parte de ella” en los vídeos grabados por los acusados.
También Miguel Ángel Morán, otro de los abogados de la agredida, manifestó que “no hubo consentimiento en ningún momento” y que la joven creyó que entraban en un portal “a fumar un porro”. Asimismo, el letrado señaló la coherencia y precisión de la versión de su clienta. Por eso, mantuvo su petición de 24 años y 9 meses de cárcel para los acusados.