SEGRE

ELECCIONES

Los núcleos rurales votan independentista, mientras que Cs se impone en las ciudades

Hegemonia de JxCat en Lleida, con la única excepción de la capital, Gimenells y Aran, que son naranja || La sobrerepresentación de los territorios menos poblados vuelve a estar en el ojo del huracán

Creado:

Actualizado:

En:

Ciudadanos hizo del lema “un hombre, un voto”, una de sus divisas. Sin embargo, no todos los votos valen lo mismo. No es una singularidad de la ley electoral catalana porque, sencillamente, no existe. Y la normativa española no prevé una una correspondencia exactamente proporcional entre los votos que recibe un partido y los escaños que tiene en el Parlament de Catalunya (o en el Congreso de los Diputados). Las zonas rurales menos pobladas tienen una sobrerepresentación que que siempre ha sido objeto de polémica. Con la ley electoral en la mano, si votara el 100% del censo, en la circumscripción de Lleida se necesitarían 20.926 votos para obtener un escaño, mientras que en Barcelona, un diputado necesitaría 48.893 votos para resultar elegido. La polémica surge porque los resultados electorales no son homogéneos y los territorios rurales no votan lo mismo que los más poblados. Esto ha sido especialmente significativo en las elecciones del día 21. Ciudadanos ganó, pero Junts per Catalunya fue la fuerza más votada en buena parte del territorio. Para el filósofo experto en temas políticos Ferran Sáez esta realidad tiene mucho que ver con una cuestión idiomática. Ciudadanos nació como un partido contrario a la inmersión lingüística, hasta entonces nunca cuestionada. “Y buena parte del electorado que ha votado Cs lo ha hecho porque se siente español, en función de la lengua que habla” (ver entrevista). Fenómenos com Súmate, que agrupa al independentismo castellanohablante, son minoritarios según esta teoría. Y en los territorios donde el catalán tiene menos implantación Ciudadanos se ha impuesto. Punto y a parte merece la Val d’Aran. La singularidad histórica, cultural e idiomática de este territorio occitano en Catalunya ha quedado de manifiesto una vez más. Ciudadanos le ha arrebatado el protagonismo que históricamente tenía el Partido Popular, y Bausen y Canejan se han convertido en los dos únicos municipios catalanes donde el PSC ha ganado las elecciones.

También singular es el caso de la Alta Ribagorça, donde Esquerra Republicana arrasó ganando en todos los municipios. Algo parecido a lo que ocurre en el Ebre, donde el amarillo de ERC contrasta con el naranja de la Costa Daurada. También en Barcelona y su área metropolitana ganó Ciudadanos. Más curioso es el caso de Gimenells. A pesar del gran revuelo que supuso que su alcalde, Dante Pérez, dejara el PSC para ser el número dos del PP en señal de protesta porque Miquel Iceta diera protagonismo a ex líderes de Unió como Ramon Espadaler, el gato al agua se lo llevó Ciudadanos.

Rompiendo la tendencia en Lleida, Aran resultó partidaria de Cs y la Alta Ribagorça, de ERC

También hubo un voto de carácter más sentimental. Vallfogona de Balaguer no dejó sola a la líder de ERC en Lleida, Meritxell Serret, consellera exiliada de esta población de la Noguera y la votó masivamente. Esquerra también sacó buenos resultados en el Pallars Sobirà y en algunos de los municipios más grandes de Lleida, como Alcarràs.

Dos realidades para un mismo país.

tracking