PANORAMA
Un mes para despejar el futuro político de Catalunya
Junqueras comparece mañana ante el juez del Supremo || El ministro de Interior dará explicaciones sobre el operativo 1-O
El ministro de Interior, J.I. Zoido, en una imagen de archivo.
Este mes de enero estará salpicado de citas políticas y judiciales muy importantes para la situación en Catalunya, que comenzarán mañana con la comparecencia de Oriol Junqueras en el Supremo y llegarán hasta el 31 de enero, cuando debería celebrarse la sesión de investidura del nuevo president del Parlament. Los plazos de las conversaciones entre JxCAT, ERC y la CUP para hacer valer su mayoría absoluta tendrán como fecha clave el 17 de enero, fijada por el Gobierno central para la sesión constitutiva del Parlament. A partir de ese momento, la ley electoral establece un plazo de diez días hábiles para que se celebre la sesión de investidura del nuevo mandatario, es decir, el último día del mes. Por ahora, las negociaciones políticas entre los partidos del bloque independentista y el calendario postelectoral corren en paralelo a las citas judiciales en el Tribunal Supremo, para las que se han marcado mañana y el próximo 11 de enero. Así, el vicepresident del Govern cesado, Oriol Junqueras, precederá la vista ante el juez de Jordi Sànchez, Jordi Cuixart y Joaquim Forn, todos ellos encarcelados por un delito de rebelión y enaltecimiento del odio. Respecto a las citas judiciales también cabe destacar la del ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, que tendrá que comparecer el próximo jueves 18 en el Senado para dar explicaciones sobre el operativo policial del 1-O y que dejó 1.066 atendidos por las cargas según los datos del departamento de Salud. Zoido ha pedido comparecer a petición propia después de que dos grupos de la cámara alta (PSOE y Grupo Mixto) también lo solicitaran. Precisamente, el senador de este último grupo, Jon Iñárritu (EH-Bildu) fue el que difundió ayer la citación a través de su cuenta de Twitter.
El último barco que alojaba a la Policía deja el puerto de Barcelona El último barco que alojaba a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil desde los días previos al referéndum del 1-O, el GNV Rhapsody, dejó ayer por la noche el Puerto de Barcelona con destino Tánger. La naviera decidió finalmente destinar el ferry a la línea de Marruecos después de prestar servicio durante más de tres meses al ministerio de Interior, alojando a los agentes del Estado desplazados a Catalunya junto con el Moby Dada, conocido como el barco del Piolín, y el el GNV Azzurra, que ya dejaron el puerto de la capital catalana con destino Génova.
