Solbes dice que el Gobierno del PSOE erró en sus cálculos sobre la crisis

Pedro Solbes, exvicepresidente económico del Gobierno con José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que el Ejecutivo socialista cometió “errores de previsión en términos macroeconómicos” respecto de la recesión y su magnitud. En este sentido, señaló que Zapatero esperaba “volver a la normalidad” y al crecimiento en 2010, cosa que no “sucedió”. En su comparecencia ante la comisión del Congreso que investiga el origen de la crisis, Solbes admitió que el Gobierno tuvo que ser “más valiente en términos superávit y en entrar en la gobernanza de las cajas”. Así pues, explicó que se debería haber acumulado más superávit antes de la crisis, además de haber reformado el sistema de cajas de ahorro. No obstante, reconoció que el excesivo peso de factores políticos le impidieron hacer reformas. En este sentido, recordó que Zapatero estuvo en minoría en el Congreso durante sus dos mandatos. Por ello, como “todo el mundo tenía necesidad y ganas de más gasto”, no se pudieron aprobar “presupuestos con superávit” y se “desperdiciaron” algunos recursos públicos. Respecto del “boom” inmobiliario, el exvicepresidente señaló que sus críticas a la especulación en el ladrillo cayeron en “saco roto” y se lamentó que el Gobierno no pudiese hacer nada en aquel momento para frenar la escalada. “No se me ocurre cómo haber podido frenar la inversión en vivienda”, apuntó. Destacó que era “muy difícil” para los bancos no financiar la construcción, porque ese era su negocio. A este respecto, indicó que en 2004 se inició la construcción de 800.000 viviendas, cuando la necesidad era de 450.000, lo que denota que lo más importante para el sector financiero era “que la fiesta no terminase”.

En otro orden de cosas, Solbes se refirió a la polémica por el uso de la palabra “crisis” durante la campaña electoral de las generales de 2008 para definir la coyuntura de aquel momento. Así, explicó que hubiera sido una mala idea “ir a las elecciones con la palabra ‘crisis’ cuando no era totalmente evidente”.

De otra parte, Solbes defendió la existencia de puertas giratorias para los políticos siempre que se definan “muy bien” las condiciones de entrada y salida.