GOBIERNO NEGOCIACIONES
Las diferencias en sanidad y empleo enredan el pacto de Merkel y Schulz
La canciller reconoce que ambas partes asumirán “compromisos dolorosos” || El líder del SPD espera que el acuerdo proporcione un Gobierno “estable” a Alemania
La CDU y el SPD agotaron ayer las últimas horas para tratar de llegar a un acuerdo que permita la reedición de la gran coalición de Gobierno en Alemania, después de que el lunes prorrogaran las negociaciones 24 horas más.
En este sentido, la canciller alemana y líder de los democristianos, Angela Merkel, admitió, a su entrada a la cumbre, que ambas partes deberán asumir “compromisos dolorosos”. No obstante, explicó que está “dispuesta” a afrontarlos por “el bien del país” si “las ventajas predominan sobre las desventajas”. Igualmente, señaló que en “tiempos convulsos”, los alemanes esperan que los grandes partidos ofrezcan “confianza” y pongan todo de su parte para encarar el futuro con seguridad.
Merkel ve necesario que los grandes partidos ofrezcan “confianza” a la ciudadanía en “tiempos convulsos”
Por su parte, el presidente de los socialdemócratas, Martin Schulz, manifestó que espera cerrar un pacto que proporcione a Alemania un Ejecutivo “estable” y “duradero”. Igualmente, explicó que tenía “buenos motivos” para esperar que la jornada culminase con “resultados buenos, constructivos, sólidos y compartidos”. Al hilo de ello, ambos equipos negociadores debían revisar un borrador de acuerdo con 14 capítulos y 167 páginas. Sin embargo, al cierre de esta edición, las dos fuerzas, junto con la CSU bávara, todavía no habían dado por cerrada la negociación. En este sentido, el rotativo alemán Der Spiegel informó de los desencuentros en materia sanitaria y laboral. Así, Schulz exigía acabar con los contratos temporales injustificados y garantizar la igualdad de trato en la atención sanitaria pública y privada.
Además, las diferencias entre democristianos y socialdemócratas también estarían presentes en el ámbito de la defensa, según apuntó el periódico Süddeutsche Zeitung, que calificó las negociaciones de anoche de “difíciles últimos metros”. De este modo, no habría acuerdo sobre el presupuesto del ejército ni tampoco acerca de las exportaciones de armamento.
Con todo, de llegar a un consenso, el SPD tendrá que someter el pacto a la aprobación de sus bases, que rondan las 440.000 personas. El diario germano Rheinische Post avanzó ayer que se han presentado al menos 5 recursos ante el Tribunal Constitucional Federal para evitar que se celebre.
?
Las negociaciones entre democristianos y socialdemócratas para formar una nueva gran coalición se han visto marcadas por la pérdida de apoyos de ambas formaciones políticas en las encuestas. Así, por la derecha, la CDU ve como Alternativa por Alemania le come terreno con su discurso contra la política de migración. Por su parte, el SPD viene de cosechar sus peores resultados en unas elecciones federales. De hecho, sus bases achacan la debilidad electoral a la cohabitación en el Gobierno con los democristianos durante 8 de los últimos 12 años.
CDU y SPD hablan mientras pierden electorado