TRIBUNALES
El Tribunal de Estrasburgo condena a España por malos tratos a dos etarras
Sortu pide revisar las condenas de Portu y Sarasola, tras un fallo "histórico"
El portavoz de Sortu, Arkaitz Rodríguez, ha exigido la revisión de las condenas de Igor Portu y Mattin Sarasola, los dos etarras que atentaron en 2006 en la T-4 del aeropuerto de Madrid-Barajas, tras la sentencia "histórica" en la que el TEDH condena a España por malos tratos durante su arresto.
Rodríguez ha hecho esta reflexión en una rueda de prensa que ha ofrecido en San Sebastián, acompañado por varios dirigentes de Sortu como Rufi Etxeberria y Miren Zabaleta, tras conocer la citada resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
Esta sentencia concluye que España vulneró la prohibición de tratos inhumanos o degradantes en su aspecto material (el maltrato en sí) y procesal (no investigarlo), que recoge el Convenio Europeo de Derechos Humanos, aunque establece que fueron malos tratos y no tortura, porque las lesiones no tuvieron consecuencias a largo plazo y por la ausencia de pruebas concluyentes sobre el objetivo del trato infligido.
Durante su comparecencia, Rodríguez ha asegurado que la resolución es "histórica" porque, como ha dicho, "es la primera vez" que este tribunal "condena al Estado español, no ya por no investigar suficientemente unas denuncias de tortura", sino "por torturar" en un caso de "detención con incomunicación".
Ha recordado, en este sentido, que hasta ahora las siete condenas anteriores del TEDH a España habían sido "por no investigar suficientemente las denuncias".
A su juicio, este fallo también pone de manifiesto que "el Tribunal Supremo ha encubierto la existencia de torturas por haber rechazado sistemáticamente todas las evidencias que apuntaban a que nos encontrábamos ante un caso" de este tipo.
Se ha felicitado también por el "acto de justicia poética" que supone que la sentencia del TEDH se haya conocido el mismo día en el que se cumplen 37 años de la muerte de Joxe Arregi, víctima de malos tratos, además de constituir un "caso de justicia real" que "muy significativamente" procede de fuera del Estado español.
Rodríguez ha opinado también que esta resolución, "que no constituye más que la punta del iceberg", pone de manifiesto que la "tortura" ha constituido una "práctica sistemática" que ha servido para luchar "contra el independentismo" y "las demandas democráticas del pueblo vasco".
Ha denunciado además la "práctica sistemática y sistémica de impunidad y de encubrimiento" que, según ha dicho, ha hecho posible esta situación al contar con la "participación y práctica directa de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado" y la mirada hacia "otro lado" de los forenses de la Audiencia Nacional, de los juzgados y los jueces, además de la "contribución" de algunos medios de comunicación.
A su entender, el fallo del Tribunal Europeo también pone de manifiesto que "ha existido un conflicto político" en el que "no sólo" ha habido la "violencia" de ETA, ya que "el Estado español ha empleado la violencia de forma sistemática y estructural".