¿Qué puede hacer decantar la justicia alemana?
Más posibilidades para Puigdemont y detalles para decantar la balanza jurídica alemana
Dentro del auto de causa especial del juez Llarena, el punto 22.c de los antecedentes de hecho, explica por encima del hecho en sesión plenaria al Parlamento el 10 de Octubre de 2017, donde Carles Puigdemont proclamaba la República para acto seguido suspender sus efectos con el fin de llegar a un acuerdo con el Gobierno Español.
Aquí se abren dos posibilidades:
- En primer lugar que la justicia Alemana no considere violento el acto de rebelión descrito por el juez Llarena y deje en libertad a Carles Puigdemont.
- La segunda posibilidad es que en caso de considerarlo delictivo, la suspensión de la proclamación de la República efectuada por el propio Puigdemont esperando el acuerdo con el gobierno se pueda convertir en aligeramiento de la causa y aplicarse el artículo 81.2
Las presiones del Gobierno de Merkel Aunque la justicia Alemana ha demostrado sobradamente su independencia en procesos políticos sobre el gobierno Alemán, el cierto es que el caso actual supera todas las experiencias pasadas vividas entre países de la UE. El nuevo Gobierno de Angela Merkel está recibiendo muchas presiones para que considere en Puigdemont a un preso político Español. Desde la prensa, el segundo diario más leído, Süddeutsche Zeitung de Munich, ha abierto su edición digital con una crónica de Thomas Urban dónde asegura que "Alemania ya tiene su primer preso político". En esta línea otro de los principales diarios alemanes, Der Spiegel, ha hecho público un artículo en defensa del proceso catalán que culmina con la mayoría absoluta del Parlamento, también ha pronosticado la extradición del expresidente, raíz de las declaraciones de varios abogados y juristas de referencia. Por el ámbito político, la comparecencia del Vicepresidente del Bundestag, Wolfgang Kubicki que pronosticaba la no extradición por rebelión del expresidente abría otra línea de escenarios posibles. Finalmente se han sumado también a las presiones varios portavoces políticos como Andrej Hunko, del Die Linke, que tilda la detención de “vergüenza” pidiendo la liberación, también Franziska Branter, de los Verdes, asegura que “la cuestión catalana no la pueden resolver ni la justicia ni el gobierno federal alemanes” y Alexander Lambsdorff, vicepresidente de los liberales del FDP, que ha declarado que “Puigdemont crea grandes problemas políticos” y que Berlín se ha convertido en parte de la crisis constitucional española.
Otras posibilidades. Alemania tiene otras dos salidas, poco probables, para tratar de evitar el confrontament interno y el retorno de Puigdemont a territorio español.
- El primer caso sería el uso del protocolo de asilo político que existe en la UE. El artículo 24 del tratado de Lisboa del año 2007 sobre asilo político concedía unas excepciones por las cuales un individuo de un estado miembro podía reclamar asilo. Estos pasan desde que haya un estado de excepción a un país miembro, hasta que Alemania pudiera considerar que España ha efectuado una petición infundada y que es necesaria la revisión y la denuncia en el Consejo Europeo. Todas las excepciones son improbables en la aplicación en este caso, pero tampoco imposibles.
- La última salida, y también sin ninguna experiencia previa, sería que la justicia alemana considerara que el procedimiento judicial ya se ha iniciado en Bélgica y que está en este país al cual le corresponde juzgar a Carles Puigdemont, la colaboración entre estos dos países se ha dado en contadas veces y todas en procesos por terrorismo, nunca en un proceso político o similar.
Especial.
Los escenarios de Puigdemont en Alemania
, por Josean Sobrino