La Fiscalía alemana defiende la extradición de Puigdemont por rebelión y malversación

La Fiscalía General del estado federado alemán de Schleswig-Holstein se posicionó ayer a favor de entregar a las autoridades españolas a Carles Puigdemont por los delitos de rebelión y malversación de fondos públicos de los que le acusa el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena. En este sentido, el Ministerio Público germano indicó que ambos delitos tienen su equivalente en el código penal alemán y que la euroorden emitida por Llarena tiene validez. Asimismo, solicitó que el líder de JxCat continúe en la prisión de Neumünster a la espera de la resolución del procedimiento de entrega ya que la Fiscalía aprecia “riesgo de fuga”. Por su parte, Puigdemont contestó que si queda libre “obviamente no me escaparé” de Alemania. Además, su abogado Jaume Alonso-Cuevillas avanzó que va a buscar una residencia en el país para facilitar su salida en libertad. No obstante, el futuro inmediato de Puigdemont está en manos del Tribunal Superior de Justicia de Schleswig-Holstein que espera resolver la extradición “en un par de días”, en palabras de la portavoz de este órgano judicial, Frauke Holmer. Sin embargo, después Puigdemont podría recurrir la resolución y, en ese caso, la última palabra la tendría el Tribunal Constitucional alemán, en un procedimiento que se prolongaría unos dos meses. Tras conocerse el posicionamiento de la Fiscalía alemana, el diputado del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, reafirmó su “confianza” en la justicia germana y reiteró que los argumentos que sustentan la extradición son “débiles”. Por el contrario, la líder de Ciudadanos en Catalunya, Inés Arrimadas, manifestó que “respetamos las leyes democráticas y las decisiones judiciales” y criticó a los independentistas por querer “incluir” a Alemania “en su larga lista de fachas”. En la misma línea, el presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy, se abstuvo de comentar la decisión del Ministerio Público, pese a que el portavoz popular en el Congreso, Rafael Hernando, expresó su deseo de que Carles Puigdemont comparezca “cuanto antes” ante la justicia española.

BARCELONA

La Mesa del Parlament dio ayer luz verde, con el apoyo de JxCat y ERC, a la solicitud para delegar el voto de Carles Puigdemont en otro diputado de su grupo parlamentario, pese a las advertencias de los letrados de la Cámara que, de forma verbal, avisaron de que la decisión podría contravenir las medidas cautelares impuestas por el Tribunal Constitucional y que imposibilitaron una investidura telemática o delegada del líder de JxCat cuando se encontraba en Bélgica. Ahora que está encarcelado provisionalmente en Alemania, los grupos independentistas consideran que ya se dan las circunstancias para que pueda confiar su voto en un compañero de coalición. No obstante, los servicios jurídicos de la Cámara apuntaron a que, si se hace efectiva la delegación del sufragio de Puigdemont en el hemiciclo, podrían anularse las decisiones del Parlament en las que hubiera votado el número 1 de JxCat. En todo caso, Ciudadanos, PSC y PP anunciaron que van a presentar sendos recursos contra la decisión de la Mesa. A este respecto, Arrimadas explicó que “los propios letrados, el Constitucional y el sentido común dicen que un huido de la justicia no puede delegar su voto”. En la misma línea, la diputada socialista en el hemiciclo de La Ciutadella, Eva Granados, remarcó que “alguien que tiene una orden de búsqueda no puede delegar su voto”. Por su parte, el presidente de los populares catalanes, Xavier García Albiol, aseveró que su formación recurrirá al Tribunal Constitucional si no se reconsidera el voto delegado de Puigdemont. En otro orden de cosas, el presidente del Parlament, Roger Torrent, transmitió a la Mesa que se mantiene el pleno previsto para mañana en el que, entre otras cosas, se debatirá la petición de Ciudadanos para que comparezca ante la Cámara.