Sànchez pide al juez Llarena poder asistir al pleno para ser investido

El número dos de JxCat, Jordi Sànchez, pidió ayer al juez del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena poder salir de prisión para asistir al pleno del próximo viernes en el Parlament y someterse a la sesión de investidura, o participar en la sesión mediante videoconferencia. El abogado de Sànchez, Jordi Pina, alegó, en un escrito ante el TS, la resolución del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, en la que se insta al Estado a “garantizar cautelarmente” los derechos civiles y políticos del exlíder de la ANC.

En este sentido, el presidente del Parlament, Roger Torrent, dijo que el juez a Llarena “tiene una oportunidad de oro para rectificar y no vulnerar los derechos políticos” de Sànchez. Por su parte, el portavoz adjunto de Ciudadanos, Fernando de Páramo, recriminó a Torrent que diga al magistrado “lo que tienen que hacer.

En el caso de que Llarena aceptara la petición de Sànchez, el candidato de JxCat aún no tiene garantizada la elección. Al contar solo con los votos favorables de su partido y de ERC, únicamente podría ser investido en segunda vuelta, siempre que se garantice la delegación de voto de Carles Puigdemont y Toni Comín. En este contexto, la CUP insistió en su abstención, que escenificó ayer con un viaje a Berlín para transmitirle a Puigdemont su apoyo en una hipotética investidura.

La Mesa del Parlament, con mayoría de JxCat y los republicanos, descartó ayer debatir sobre la delegación del voto de Puigdemont, aplazando el tema para el viernes antes del pleno. Por su parte, Comín aún no ha pedido formalmente poder votar en la sesión plenaria. Torrent opinó que “es lógico” aceptar la delegación de voto de ambos, ya que sus movimientos están restringidos por decisiones judiciales.

Torrent recordó que Puigdemont continúa siendo diputado y, por tanto, es susceptible de ser investido. Estas declaraciones coincidieron con el visto bueno por parte de la Mesa, a aceptar las enmiendas a la ley de presidencia, con las que el líder de JxCat podría ser investido. Por su parte, el PSC anunció que llevará las enmiendas al Consell de Garanties. El grupo popular y Ciudadanos pidieron que el proceso sea “personal” e “indelegable”.