JxCat no descarta a Puigdemont pero rechaza forzar nuevas elecciones

El grupo parlamentario de JxCat se vio ayer en Berlín con Carles Puigdemont en el marco de una “reunión habitual”, según el portavoz de la coalición, Eduard Pujol. El encuentro sirvió para “analizar de forma precisa todos los movimientos a nivel judicial, político, social y cívico” que se producen en Catalunya porque “pasan muchas cosas en poco tiempo”, indicó. Pujol aseguró que no está sobre la mesa un “cuarto nombre” para presidir la Generalitat, después de que Carles Puigdemont, Jordi Sànchez y Jordi Turull hubieran sido vetados, de un modo u otro, por los tribunales. Asimismo, no descartó volver a presentar a su número 1 a la investidura porque “su legitimidad es absoluta y el país le reconoce” como president. En cuanto a los tempos de la investidura, Pujol dijo que “ya sabemos el calendario que tenemos y que el tiempo se acaba el 22 de mayo” pero avisó de que “nos sentimos cómodos a nivel de plazos para hacer valer todas las opciones, también la de Puigdemont” y advirtió de que “hay margen” aún para “llevar al Parlament aquello que la calle legitimó el 21D”.

Por su parte, el diputado de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, urgió a investir un nuevo president para echar a los “colpistas del 155” cuanto antes mejor e impedir que “los novios de la muerte” sigan dirigiendo la Generalitat.

La CUP ve “necesario” desobedecer al Estado y fía su apoyo a un programa de gobierno “republicano”

Desde la CUP, el diputado Carles Riera insistió en la “necesidad” de que el Parlament lleve a cabo un acto de “soberanía política le guste o no le guste al Estado”. A este respecto, el cupaire advirtió de que “si esto va de hacer República, cualquier acto de obediencia a las autoridades españolas no sirve de nada”. Por eso, reiteró que su partido apoyará al candidato que presente un programa “nítidamente republicano”. “Esperamos que JxCat y ERC estén a la altura, basta ya de recular”, concluyó Riera.