ETA pide perdón

La banda terrorista ETA hizo ayer público un comunicado en el que reconoce el “daño causado en el transcurso de su trayectoria armada” y admite “la responsabilidad directa que ha adquirido en ese dolor”. Sin embargo, hace distinciones entre las diferentes víctimas y contextualiza sus acciones en un “conflicto” que remonta al bombardeo de Gernika en 1937, en plena Guerra Civil.

Así, el comunicado remitido a Gara, un paso exigido antes de su previsible y próxima disolución, emplea terminología y conceptos inéditos en la historia de ETA, como la petición expresa y literal de “perdón”, aunque lo limita a las víctimas “que no tenían participación directa en el conflicto” y evita calificar su actuación como injusta.

La exetarra Carmen Guisasola cree que “algunas víctimas no van a entender” el comunicado

ETA habla de un “sufrimiento desmedido”, en referencia tanto a las víctimas que la banda ha causado como a las consecuencias que esas acciones han tenido en sus propios militantes. Habla así de “muertos, heridos, torturados, secuestrados o personas que se han visto obligadas a huir al extranjero”. Respecto al resto de las víctimas –cita muertos, heridos y secuestrados– ETA muestra “respeto” y asegura que “siente de veras” el dolor ocasionado. Llega a manifestar que “nada de todo ello debió producirse jamás o no debió prolongarse tanto en el tiempo”, ya que “hace mucho que este conflicto político e histórico debía contar con una solución democrática justa”.

Además, en un anexo critica que algunos quieren “menospreciar cualquier avance”, consciente de que su declaración iba a resultar insuficiente para muchos colectivos.

El comunicado se inscribe en el debate interno abierto para decidir su final, bajo la fórmula de la disolución o “desmovilización”, cuyo anuncio se prevé para la primera semana de mayo.

Por su parte, los obispos de Navarra, País Vasco y Bayona pidieron “sinceramente perdón” por sus “complicidades, ambigüedades y omisiones” ante el terrorismo de ETA.

El líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, aseguró que la declaración de ETA es “un hecho histórico sin precedentes” y supone “una contribución definitiva” a la paz “que interpela a todos” para que asuman sus responsabilidades.

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El comunicado causó ayer un rechazo generalizado por su distinción entre las distintas víctimas. Ventiuna asociaciones de afectados por el terrorismo firmaron un comunicado en el que anuncian que seguirán reclamando justicia y no admitirán que “quienes causaron tanto sufrimiento y dolor pretendan encontrar atajos”.

Estas asociaciones aseguraron que resulta inadmisible que pretenda diferenciarse entre dos tipos de víctimas, las “ajenas al conflicto” y las que en opinión de los terroristas no lo eran.

La presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo (FVT), Mari Mar Blanco, dijo que la palabra perdón queda muy bien en un comunicado pero está vacía de contenido porque a día de hoy ni reconocen de manera unilateral el daño cometido y siguen hablando de conflicto y de víctimas de dos bandos.

Mientras, la exetarra Carmen Guisasola cree que “algunas víctimas no van a entender” el comunicado de ETA y se pregunta “en qué parte quedan Yoyes o Isaías Carrasco”.

El Gobierno central, señaló a través de un comunicado oficial que el anuncio de ETA “no es más que otra consecuencia de la fortaleza del Estado de Derecho que ha vencido a ETA con las armas de la democracia”, al tiempo que aseguró que “jamás” habrá contrapartidas con la banda terrorista ETA.

Los partidos, a excepción de EH Bildu, que lo tildó de histórico, criticaron igualmente el perdón selectivo de ETA, aunque tanto PNV como PSE pusieron en valor el paso dado por la banda en los días previos a su disolución.

Desde Euskadi, el lehendakari, Iñigo Urkullu dijo que el comunicado es “un paso”, al tiempo que pidió que ETA, “o quienes redacten los comunicados”, no pierda la oportunidad para que cuando anuncie su final “de manera unilateral”, tenga “la misma consideración a todas las víctimas y reconozca el daño injusto causado por su actividad”.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, calificó el comunicado de “gran paso para la paz definitiva”, al tiempo que dedicó un mensaje de “reconocimiento y respeto” a todas las víctimas del terrorismo.

Por su parte, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, afirmó que “ni hubo un ‘conflicto’” en el País Vasco, “ni hay víctimas de primera y de segunda, como dice ETA” en el comunicado.