TRIBUNALES CRIMEN
“Si lo he hecho yo, que me maten”, dice el presunto asesino de Laia
Asegura que no se acuerda de nada del día de la muerte de la niña en Vilanova i la Geltrú || Dictan su ingreso en la unidad psiquiátrica de Can Brians I
El presunto asesino de una niña de 13 años en Vilanova i la Geltrú, que ayer fue ingresado en la unidad hospitalaria psiquiátrica del centro penitenciario de Can Brians I, en la localidad barcelonesa de Sant Esteve de Sesrovires, expresó durante su declaración que “si lo he hecho yo, que me maten o me entreguen a la familia para que me mate”. “No se si soy un monstruo, no me lo perdonaré”, dijo el acusado entre lágrimas en su declaración. Aun así, aseguró que no se acordaba y que, en caso de hacerlo, se presentaría ante la jueza para confesar. Remarcó que él era incapaz de hacer algo así e instó a las autoridades a investigar si alguien pudo haber entrado en su domicilio y haber cometido el crimen.
Su abogado, Ález Zaragüeta, dijo que su cliente solo tenía recuerdos de encontrarse a la menor muerta y ensangrentada, y de intentar reanimarla. “Se quedó en shock, tenía las manos agarrotadas”, aseguró el abogado, que admitió que el acusado reaccionó mal al no llamar a la policía.
El sospechoso, al que se le acusa de los presuntos delitos de homicidio o asesinato y de agresión sexual, pasó el jueves a disposición judicial. Tras ser sometido a un examen psicológico, se determinó que estaba en condiciones de declarar. El acusado solo contestó a las preguntas de sus abogados, concretando que había tomado muchas cervezas y que ese día había ido hasta en cuatro ocasiones a comprar cocaína. El juzgado número 1 de Vilanova decretó el mismo jueves por la noche su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza.
El abogado de la familia de la víctima, que se ha personado como acusación particular, Antoni Prats, valoró que el acusado pretendió “dar pena” durante su declaración. Aseguró que las mismas pruebas periciales “desvirtúan su versión” de que no se acordaba de los hechos. El detenido intentó limpiar con una fregona la sangre que había en la habitación. La menor presentaba heridas de arma blanca, aunque la autopsia determinó que murió por asfixia. También había indicios de abuso sexual, ya que a la víctima le faltaba el pantalón.