PANORAMA
Un año de la ley de desconexión con el enfrentamiento entre partidos
Torrent y sus antecesores alaban a Forcadell y piden su libertad || El PSC destaca que advirtió de las consecuencias y Cs denuncia que el Parlament sigue “degradado”
El presidente del Parlament, Roger Torrent, defendió ayer la gestión de su predecesora al frente del hemiciclo, Carme Forcadell, con motivo del primer aniversario del pleno en el que la Cámara aprobó las leyes de desconexión. En este sentido, Torrent señaló que, durante aquellas jornadas, “blindamos y reforzamos la democracia”. Asimismo, alertó de que, mientras siga en el cargo, “en el Parlament se podrá hablar de todo”. Precisament Torrent, junto a los expresidentes del Parlament Joan Rigol, Ernest Benach y Núria de Gispert, firmó ayer un artículo en La Vanguardia en el que calificó de “injustificable” el encarcelamiento preventivo de Forcadell desde marzo por haber permitido “debatir y someter a votación una ley presentada por dos grupos haciendo uso de su potestad”. De hecho, la propia Forcadell, en un mensaje en Twitter, se mostró “convencida de haber hecho lo mejor por el bien de la democracia”.En la misma línea, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que lleva 6 meses en Suiza, puso en valor que, en aquella sesión, Forcadell velara por los derechos de todos los parlamentarios. Igualmente, denunció que, a la oposición, “le asusta el debate sobre la autodeterminación”. “Tienen miedo de la democracia”, destacó. Coincidiendo con la efeméride, Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y sus consellers firmaron una carta en la que llamaron a la movilización y a no perder la “esperanza” para afrontar el “largo camino”. Por contra, el líder socialista, Miquel Iceta, recordó que “el 6 y 7 de septiembre del año pasado ya advertimos de las consecuencias de saltarse las normas”. En la misma línea, el exportavoz de Catalunya Sí Que Es Pot, Joan Coscubiela, en un acto en la sede del PSC, dijo que aquella sesión, a la que tildó de “estafa”, dio inicio a un “grave retroceso nacional”. Carlos Carrizosa, portavoz de Cs, lamentó que la Cámara siga “degradada” un año después, y el líder del PP catalán, Xavier García-Albiol, destacó que fue su partido el que paró el “golpe” con el 155.
Puigdemont, Junqueras y sus consellers llaman a movilizarse para afrontar el “largo camino”
BARCELONA
El juzgado de instrucción número 7 de Barcelona ha imputado a un mando de la Policía Nacional por su actuación durante el 1-O en el centro concertado Fedac del distrito de Horta, en la ciudad de Barcelona. En este sentido, en su resolución, el juez explica que la entrada de los agentes en el colegio “no estaba amparada” por el auto del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que sólo ordenaba hacerlo en los centros de votación ubicados en edificios públicos. “Debe preguntarse por qué se actuó, se empujó y zarandeó a las personas que allí se encontraban”, señala el juez. A este respecto, el teniente de alcalde de la ciudad condal Jaume Asens explicó ayer que los agentes accedieron en Barcelona a otros dos colegios electorales situados en centros concertados. Por otro lado, la comisaria de los Mossos d’Esquadra en la zona norte de Barcelona, Cristina Manresa, admitió el pasado 13 de julio en un juzgado de Sabadell que los agentes, el día del referéndum, tenían orden de “negociar” pero no de proceder al cierre inmediato de los colegios, según avanzó ayer El Mundo.
En otro orden de cosas, el activista del CDR Adrià Carrasco, al que se le imputa rebelión, sedición y terrorismo, reapareció ayer tras 5 meses desaparecido en Bruselas para denunciar que el Estado lo haya usado como “cabeza de turco” para “atemorizar” a los independentistas.