'Torxes' mojadas y muy reivindicativas

Centenares de leridanos participaron ayer en la Marxa de les Torxes desde el convento del Roser hasta la Seu Vella en el que se ha convertido en uno de los actos más multitudinarios previos a la Diada en la ciudad. Ni la lluvia ni el itinerario empinado que parte de la calle Cavallers desanimaron a las aproximadamente 1.200 personas, según la Guardia Urbana, que encendieron sus antorchas y recorrieron los poco más de 500 metros que separan estos dos símbolos de la resistencia del pueblo leridanos frente a la invasión de las tropas borbónicas en la Guerra de Sucesión. La marcha avanzaba con los típicos cánticos de “I-inde-independència” o “Visca Catalunya lliure”, amenizados con el ritmo de las grallas y los tambores que escoltaron las múltiples pancartas, banderas y antorchas del recorrido. No faltaron las reivindicaciones para pedir la libertad de los políticos independentistas presos y exiliados y la lluvia obligó a más de uno a improvisar paraguas o chubasqueros con chaquetas, periódicos e incluso farolillos diseñados para la ocasión. Una vez la marcha llegó a las puertas de la Seu Vella se leyó un manifiesto a cargo de la antropóloga Patricia Rocha y del cirujano Joan Viñas, exrector de la UdL y Creu de Sant Jordi, que reivindicaron “el mandato obtenido el 1 de octubre para hacer efectiva la república” y animaron a los asistentes a seguir luchando y reivindicando las libertades del pueblo catalán. El acto lo cerraron los Cantaires de Ponent, que cada lunes se dan cita en la Paeria, con algunas de sus versiones y con Els Segadors.

Por otra parte, más de un millar de personas participaron anoche en las Marxes de Torxes convocadas en diferentes municipios de las comarcas de Lleida. Así, la marcha de Tàrrega reunió a unas 400; mientras que 300 acudieron a las de Mollerussa. Hubo más de doscientas en las de Cervera y Guissona (ver página 10).