POLÍTICA ESTADO-GENERALITAT
Sin acuerdo sobre infraestructuras en la primera cumbre en 11 años
La Generalitat y el Gobierno central han decidido impulsar un grupo de trabajo para determinar la forma en que se pagarán los 200 millones de euros procedentes de la Disposición Adicional Tercera (DA3) del Estatut que la Comisión de Asuntos Económicos y Fiscales acordó que se pagarían en 2019.
Así lo explicó el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, tras finalizar sin acuerdo la Comisión Bilateral de Infraestructuras, que no se reunía desde 2007, y en la que participó también el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Pedro Saura.
Saura presentó a Calvet un listado de obras a impulsar mediante los Presupuestos Generales del Estado
En virtud de la DA3, que establece que el Estado satisfaría el déficit de inversión en infraestructuras respecto al peso de Catalunya en el PIB estatal, en 2010 se pagaron 335 millones correspondientes a 2007, y se calcularon 759 millones para 2008, pero, aunque se preveía que se pagaran en 2011, nunca llegaron a materializarse.
De este modo, de todo el periodo de aplicación de la DA3, entre 2007 y 2013, sólo se han pagado los 335 millones correspondientes a 2007, y la Comisión de Asuntos Económicos y Fiscales acordó que de los 759 millones correspondientes a 2008, 200 se pagarían en 2019: “Aún no hemos llegado a ningún acuerdo”, indicó el conseller.
Para Calvet, estos 200 millones “deben ir con una materialización directa hacia la Generalitat, como se hizo con los 335 millones que se pagaron en 2010, mientras que el Estado considera que los 200 millones pueden ser inversión continuista respecto a los proyectos que ya están en marcha en Catalunya”.
Calvet reconoció que durante las tres horas de reunión no se abordó ningún otro punto, pese a que Saura llevó al encuentro obras un listado de obras a impulsar mediante los Presupuestos para 2019.
Entre ellas figuraban los desdoblamientos de la R3 de Rodalies, los accesos ferroviarios y viarios al Puerto de Barcelona, el acceso ferroviario al Puerto de Tarragona y los soterramientos de las vías del tren de Montcada i Reixac, Sant Feliu de Llobregat y L’Hospitalet de Llobregat o la conexión de la A-2/AP-7 con la B-30 en Castellbisbal, entre otras.