Los partidos avalan la negociación pero se enrocan en el referéndum

La cumbre de las fuerzas con representación en el Parlament, auspiciada por los socialistas y celebrada ayer en el Palau de la Generalitat, acabó con un acuerdo de mínimos en el que el Govern, JxCat, ERC, Catalunya en Comú-Podem y el propio PSC apostaron por continuar explorando la vía del diálogo y la negociación para solucionar el conflicto catalán. No obstante, las conversaciones entre las cuatro formaciones y el Executiu se encallaron en relación con el referéndum, el punto más espinoso del orden del día. En este aspecto, mientras que JxCat y ERC abogaron por un referéndum de autodeterminación, los comunes exigieron un “pacto de claridad” que siente las bases de una futura consulta acordada, y los socialistas se mostraron partidarios de reformar el Estatut para ampliar el autogobierno. “Nosotros queremos votar una reforma estatutaria combinada con una reforma constitucional”, explicó Iceta, que se felicitó, a su vez, porque “el gran pacto de hoy ha sido aislar los hechos violentos, promover el respeto y seguir hablando”. Por su parte, la líder de CatComú en el Parlament, Jéssica Albiach, señaló la necesidad de incorporar las fuerzas sociales a la mesa para que el diálogo sea “transversal”. Por su parte, el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, señaló el ejercicio de la autodeterminación y la consecución de la independencia como objetivos del diálogo, en la misma línea que el diputado de JxCat Albert Batet. Batet insistió en que el espacio de diálogo abierto ayer “debe ser efectivo”. En nombre del Govern, su portavoz, Elsa Artadi, manifestó su voluntad de que la mesa de diálogo cree un “frente antirrepresivo” que denuncie la “regresión” de derechos.

Por otro lado, un agente de la Policía Nacional investigado por un juzgado de Barcelona por su participación en las cargas policiales en la escuela Àgora de la capital catalana en el 1-O admitió ayer ante el juez que uno de sus compañeros golpeó con la porra la cabeza de los votantes. Sin embargo, no concretó qué agente fue. En otro orden de cosas, un total de 25 sacerdotes y 2 diáconos de los obispados leridanos suscribieron ayer una carta en la que instaban a la Iglesia española a implicarse para encontrar soluciones al conflicto catalán. Por otra parte, los leridanos Sònia Oriola y Ramon Augé fueron elegidos por los asociados del PDeCAT para el equipo directivo de la formación.

Artadi insta a la mesa de diálogo a crear un espacio “sólido” contra la represión y la regresión de derechos

MADRID

La exconsellera de Trabajo Mar Serna se perfila como nueva vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a propuesta del PSOE. Serna, que estuvo en el Govern presidido por José Montilla, ha entrado a última hora en la lista que populares y socialistas consensúan para la configuración del órgano de gobierno de los jueces. De este modo, el PSOE presentaría una lista paritaria para el CGPJ y haría un gesto a los socialistas catalanes. En la actualidad, la exconsellera es jueza de lo social en Barcelona y forma parte de la asociación progresista Jueces y Juezas para la Democracia. Junto a Serna, el PSOE ha introducido en la lista a la expresidenta del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género del CGPJ Inmaculada Montalbán, que en la actualidad está en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Otra experta en violencia de género, la presidenta de la Audiencia Provincial de Navarra, Esther Erice, también accederá como vocal a este órgano a propuesta de los socialistas.

Por otro lado, el abogado leridano Simeó Miquel ha sido propuesto por Podemos para uno de los puestos de vocal del futuro CGPJ. Así, según explicaron fuentes parlamentarias, Miquel forma parte de los suplentes de la lista que PSOE y PP ultiman para renovar el órgano de gobierno de la judicatura. El leridano, que es miembro de Advocacia per la Democràcia, fue uno de los redactores del recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional impulsado por esta asociación para oponerse a la aplicación del 155 en Catalunya. Desde Advocacia per la Democràcia lamentaron que el activismo de Miquel “motive” el voto en contra de la candidatura del “prestigioso abogado de Lleida” por parte de PP y Ciudadanos.