Moncloa da forma a su plan contra aforamientos sin los apoyos seguros

El Gobierno aprobó ayer su propuesta de reforma constitucional para limitar los aforamientos de los miembros del Ejecutivo central, diputados y senadores al estricto ejercicio de sus funciones en el cargo, un anteproyecto de ley que no cuenta de partida con el apoyo del PP y Cs, cuyos votos son imprescindibles para aprobarla. No obstante, el Ejecutivo de Pedro Sánchez confía en que en un año esta reforma esté lista y pueda entrar en vigor, según afirmó la vicepresidenta Carmen Calvo en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. Ella añadió que esta propuesta “fortalecerá la democracia”.

El texto del Gobierno plantea la modificación de los artículos 71.3 y 102.1 de la Constitución para limitar el aforamiento “estrictamente a las funciones del cargo”, según concretó Calvo. La vicepresidenta también explicó que Sánchez abrirá una ronda con todos los grupos parlamentarios con el objetivo de recabar su apoyo para la reforma limitada de la Constitución. En esa ronda, el presidente español no pedirá a Podemos que desista de su intención de pedir un referéndum sobre esta reforma.

El PP tiene mayoría absoluta en el Senado, órgano necesario para la aprobación de la reforma

El Partido Popular será clave para que la reforma salga adelante puesto que esta requiere del apoyo de, al menos, tres quintas partes del Congreso (210 de los 350 diputados) y el Senado (159 de los 266 representantes), donde los populares tienen mayoría absoluta. Con esta reforma, el Gobierno central aspira a acercarse a la “tónica media” del régimen de aforamientos del que dispone el resto de Europa.

Casado opinó que no hace falta “abrir en canal” la Constitución para acabar con la corrupción en Andalucía o cesar a los ministros “investigados” por sus sociedades instrumentales. En este sentido señaló que si existe tal propuesta de reforma Podemos querrá incluir en el debate acabar con la monarquía o incluso “incluir la nación catalana” en el texto constitucional. Rivera acusó a PSOE y PP de “mangonear y repartirse los jueces para luego tener privilegios” y lamentó que con el planteamiento del Gobierno “se hable solo de uno o dos por ciento de casos que afectan a la vida privada de los diputados”. Y añadió que Cs no vinieron a “poner parches”, sino “soluciones”.

Una reforma “globo sonda” y “estafa”, según PP y Cs El líder del PP, Pablo Casado, le dijo ayer al presidente Pedro Sánchez que aplique sus “propios baremos” en el Ejecutivo en lugar de proponer una reforma de la Carta Magna que, en su opinión, es “un globo sonda” o “una cortina de humo” para “esconder” los casos de los miembros del Ejecutivo de Sánchez o el “sistema clientelar andaluz”. Por su lado, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, consideró que la tramitación ayer por el Consejo de Ministros de la eliminación de los aforamientos en caso de delitos cometidos fuera del ejercicio del cargo político es una “estafa” y un “engaño” que “pretende blindar a los corruptos”.