El Supremo rebaja la inhabilitación a Mas por el 9-N a trece meses aunque ratifica la multa

El Tribunal Supremo rebajó ayer la condena impuesta contra el expresident Artur Mas en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) por desobedecer la prohibición del Tribunal Constitucional de organizar la consulta del 9-N. Así, en su resolución, los magistrados revisaron a la baja la pena de inhabilitación que, de dos años, ha pasado a ser de un año y un mes. De este modo, el periodo en el que el también exlíder de CDC no podrá presentarse a las elecciones coincide con el que se impuesto en su día al exconseller de Presidencia y exdiputado de CiU en el Congreso, Francesc Homs. Por el contrario, el alto tribunal ratificó la multa de 36.500 euros para Mas. Por otro lado, el Supremo también rebajó las condenas de inhabilitación de la exvicepresidenta de la Generalitat Joana Ortega y de la exconsellera de Enseñanza Irene Rigau. Así las cosas, la pena impuesta a la primera es de 9 meses de inhabilitación y la de la segunda, a 6 meses. Igualmente, el alto tribunal confirmó las multas de 30.000 euros y de 24.000 euros, respectivamente.

En otro orden de cosas, la Audiencia Nacional decidirá en enero si es competente para juzgar al exmajor de los Mossos d’Esquadra Josep Lluís Trapero por un presunto delito de rebelión. En esta causa están también investigados por este mismo delito Pere Soler, exdirector de los Mossos, y César Puig, exsecretario general de Interior. Por su parte, la intendente Teresa Laplana está imputada por sedición. El juicio en la Audiencia Nacional no comenzará antes del verano, indicaron ayer fuentes jurídicas. Por otra parte, el TSJC registró la querella de Cs contra el president del Parlament, Roger Torrent, y los miembros soberanistas de la Mesa por “no cumplir” con la suspensión de los diputados procesados en el Supremo.