El Gobierno italiano ensalza a los “chalecos amarillos” franceses

Los dos vicepresidentes del Gobierno italiano, Luigi Di Maio, del Movimiento 5 Estrellas, y Matteo Salvini, de La Liga, se mostraron ayer a favor de las reivindicaciones de los “chalecos amarillos” franceses, que protestan contra las políticas del presidente galo, Emmanuel Macron. Di Maio, a través de su blog personal, animó a este movimiento a “no rendirse” porque “una nueva Europa está naciendo”. “Tanto en Francia como en Italia la política se ha vuelto sorda a las exigencias de los ciudadanos. El grito que se eleva desde las calles franceses es en definitiva el de dejadnos participar”. En la misma línea, Salvini dijo apoyar “a los ciudadanos de bien que protestan contra un presidente que gobierna contra su pueblo”. Las declaraciones de los líderes de los dos partidos que sostienen el Ejecutivo italiano del primer ministro Giuseppe Conte coincidieron con la polémica desatada por las agresiones que el ex boxeador galo Christophe Dettinger perpetró contra varios agentes antidisturbios el pasado sábado en París, en el marco de una nueva movilización de los “chalecos amarillos”. Dettinger, que se entregó a las autoridades y explicó que únicamente se defendió del ataque de un policía a él y a su esposa, aparece en varios vídeos pateando a los agentes. Antes de librarse a la Policía, reivindicó las protestas pacíficas y se comprometió con la causa de los “chalecos amarillos”.