La polémica por el “relator” lleva a nuevas contradicciones entre Generalitat y Gobierno

Los gobiernos central y catalán continuaron ayer con versiones contradictorias sobre la tercera figura en discordia en los diálogos. La vicepresidenta del Gobierno central, Carmen Calvo, insistió que esta figura estará dentro de las mesas de diálogo entre partidos catalanes y que debería ser alguien catalán. Dijo que la función será ayudar a la convocatoria y los debates que afronten los partidos, pero no entre ejecutivos. “No será un mediador internacional”, dijo, ni un enlace entre los dos gobiernos, como apuntaron PP y de Cs y algunos barones del PSOE. Por su lado, la portavoz del Govern, Elsa Artadi, afeó que Calvo situara esta tercera figura dentro de las mesas de diálogo entre partidos catalanes, y dijo que es algo sobre lo que Madrid no puede opinar. Sitúa el testimonio en la mesa de partidos españoles que reclama la Generalitat, y advirtió que si no hay acuerdo sobre esta figura el diálogo “no podrá ser efectivo”. Insiste en que cualquier escenario debe incluir el derecho a la autodeterminación. También insistió en desvincular esto de los presupuestos del Estado. Artadi, el vicepresident Pere Aragonès y Calvo hablaron ayer por videoconferencia y se reunirán de nuevo mañana. La reunión, que duró una hora y media, les sirvió para hablar de “muchas cosas” y acordar seguir trabajando para avanzar en las negociaciones.

En medio de la polémica, PP, Cs y Vox han convocado una manifestación en Madrid para el domingo con el objetivo de mostrar su rechazo a Sánchez por la “traición”. El líder del PP, Pablo Casado, planteó una moción de censura a Sánchez por la “alta traición a España” con la figura del relator. La líder del PP leridano, Marisa Xandri, pidió ayer al alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, que desautoricen la propuesta.